Identifican un nuevo método para diagnosticar una conmoción cerebral usando saliva

Un estudio dirigido por la Universidad de Birmingham, en Reino Unido, sobre jugadores de rugby de primer nivel del país, llevado a cabo en colaboración con Rugby Football Union (RFU), Premiership Rugby y Marker Diagnostics, ha identificado un método para diagnosticar con precisión la conmoción cerebral utilizando saliva, allanando así el camino para la primera prueba clínica no invasiva para la conmoción cerebral para uso en deportes y otros entornos.

Tras una investigación anterior del equipo, que identificó que la concentración de moléculas específicas en la saliva cambia rápidamente después de una lesión cerebral traumática, los investigadores se embarcaron en un estudio de tres años en rugby de élite para establecer si estos ‘biomarcadores’ podrían usarse como prueba de diagnóstico para la conmoción cerebral relacionada con el deporte.

Usando tecnología de secuenciación de ADN en el laboratorio de la Universidad de Birmingham, el equipo de investigación probó estos biomarcadores en muestras de saliva de 1.028 jugadores profesionales de rugby masculinos que compiten en las dos principales ligas de rugby inglés: la Premiership y el Campeonato.

Los resultados del SCRUM (Study of Concussion in Rugby Union through MicroRNAs), publicados en el ‘British Journal of Sports Medicine’, han demostrado por primera vez que se pueden usar biomarcadores salivales específicos para indicar si un jugador ha sufrido una conmoción cerebral. Además, la investigación ha encontrado que estos biomarcadores brindan más información sobre la respuesta del cuerpo a las lesiones a medida que evolucionan desde inmediatamente después del trauma, hasta varias horas e incluso días después.

El avance científico proporciona una nueva prueba de conmoción cerebral biológica salival no invasiva basada en laboratorio, que podría tener un uso de amplio alcance y potencial para reducir el riesgo de perder conmociones cerebrales no solo en el deporte, desde la base hasta el nivel profesional, sino también en entornos más amplios como como militar y sanitario.

Marker Diagnostics, una subsidiaria de la empresa suiza de biotecnología Marker AG, está en el proceso de comercializar la prueba patentada como prueba de venta libre para atletas masculinos de élite. También ha obtenido una marca CE para pruebas.

El equipo ahora tiene como objetivo recopilar más muestras de jugadores en dos competiciones de rugby masculino de élite con el fin de proporcionar datos adicionales para expandir la prueba y desarrollar su uso para guiar el pronóstico y el regreso seguro al juego después de una conmoción cerebral y para establecer aún más cómo funcionará junto con el proceso de EIS.

Mientras tanto, Marker Diagnostics y la Universidad de Birmingham también están llevando a cabo varios estudios adicionales para validar aún más y expandir la prueba para su uso en diferentes grupos que no se incluyeron en el estudio SCRUM, incluidas mujeres, atletas jóvenes y deportistas comunitarios.

La primera autora del estudio, la doctora Valentina Di Pietro, de la Universidad de Birmingham y del NIHR SRMRC, explica que “la conmoción cerebral puede ser difícil de diagnosticar, especialmente en entornos como los deportes de base, donde no es posible la evaluación por parte de un médico especialista. En consecuencia, algunas conmociones cerebrales pueden desaparecer sin diagnosticar. También existen preocupación con respecto a la salud cerebral a largo plazo de las personas expuestas a conmociones cerebrales repetidas”.

Por su parte, el autor principal Antonio Belli, profesor de neurocirugía de trauma en la Universidad de Birmingham, neurocirujano consultor en UHB y director de NIHR SRMRC, agrega que “la capacidad de diagnosticar rápidamente una conmoción cerebral utilizando biomarcadores además de las herramientas existentes resuelve una importante necesidad insatisfecha en el mundo del deporte, así como en el ámbito militar y sanitario, especialmente en lesiones sin síntomas visibles significativos”.

Fuente: infosalus.com