Nuevo protector plástico contra la corrosión que se auto-repara

Un nuevo plástico desarrollado por ETH Zurich es capaz de proteger eficazmente contra la corrosión de los materiales utilizados en toda clase de estructuras.

El Poli(fenileno-metileno), o PPN por sus siglas en inglés, mata varios pájaros de un tiro. Mezclado como pintura y calentado, este material anticorrosivo puede pulverizarse sobre una superficie y se solidifica. El polímero indica la existencia de agujeros y grietas en la capa protectora al no ser fluorescente.

Y lo que es más, repara cualquier daño por sí mismo sin más intervención externa. Y al final de la vida útil de un producto, el polímero puede retirarse completamente y reciclarse con una pérdida mínima de material. El polímero reciclado puede aplicarse a otra superficie sin perder sus propiedades y funciones especiales.

Las pruebas de laboratorio revelaron que un revestimiento a base de PPM protege bien los metales, especialmente el aluminio, contra la corrosión. Aunque este revestimiento protector puede aplicarse en capas hasta diez veces más finas que los agentes protectores convencionales -como los basados en resinas epoxi-, es duradero.

Asimismo, el polímero sella por sí mismo cualquier daño que se produzca en el revestimiento. “Los mecanismos de autorreparación están muy solicitados, pero son muy difíciles de conseguir, y las buenas soluciones siguen siendo escasas”, afirma en un comunicado Walter Caseri, autor de la investigación. Lograr la autorreparación suele requerir aditivos químicos, que migran en el polímero con el tiempo y se liberan al medio ambiente. No es el caso del PPM: “Este material no necesita aditivos”, afirma Caseri, investigador del Laboratorio de Materiales Multifuncionales.

El PPM también es más sostenible que los anteriores materiales anticorrosión, porque puede retirarse por completo y reciclarse al final de la vida útil del producto. Aunque en el proceso se pierde algo de material polimérico, la tasa de reciclado es muy alta, del 95%. En sus pruebas, los investigadores pudieron reutilizar el material cinco veces.

En conjunto, todos los países invierten alrededor del 3,5% del producto interior bruto mundial anual en protección contra la corrosión, lo que equivale a unos 4.000 millones de dólares.

Fuente: EP