Ciempiés gigantes devoran miles de aves cada año en Australia

La caza de los ciempiés que se alimentan de las aves es vital para el ecosistema de Australia, señala un reciente estudio

En Australia existe una comunidad endémica de ciempiés gigantes que devoran a miles de aves cada año, por lo que se les considera como el principal depredador de la zona, señala un estudio.

Un grupo de científicos se dieron a la tarea de investigar y analizar el comportamientos de los ciempiés, los cuales sorprenden por su tamaño al alcanzar los 30 centímetros de largo, según las investigaciones recientemente realizadas.

Ciempiés gigantes, el principal depredador de Australia
Un nuevo estudio publicado en The American Naturalist señaló que la isla australiana Phillip, pertenecientes a las islas Norfolk del Pacífico Sur existe una comunidad endémica de ciempiés gigantes, científicamente conocidos como Cormocephalus coynei, los cuales se dedican a devorar hasta 3 mil 700 aves marinas cada año.

Los ciempiés pueden crecer hasta 30 centímetros de largo, pero su mayor poder es el veneno que inyectan a sus presas por medio de fórcipulas, una especie de pinzas que guardan en la parte delantera de su cuerpo.

De acuerdo con las declaraciones de los investigadores, los ciempiés son considerados como los mayores depredadores la isla Phillip porque pueden alimentarse de aves, especialmente de petrales de alas negras (Pterodroma nigripennis), así como de geckos, eslizones, grillos y peces carroñeros.

Sin embargo, su caza es vital para mantener el equilibrio del ecosistema de la isla mencionada, pues a través de sus presas lleva nutrientes del mar a la tierra, lo que favorece la vegetación del lugar, incluso señalan que está floreciendo acelerada.

La caza de los depredadores ciempiés

Para identificar el modus operandi de los ciempiés, los investigadores pasaron más de 100 horas observando su comportamiento por las noches porque aprovechan que sus presas están dormidas y son más vulnerables ante el ataque.

Según el estudio, los ciempiés emergen de sus nidos por las noches y con ayuda de sus dos antenes sensibles viajan por el suelo del bosque para buscar a sus víctimas.

Los petreles de alas negras son aves que normalmente construyen sus madrigueras en el sueño, blando perfecto para que los ciempiés ataquen a los polluelos.

Mientras las víctimas descansan, los ciempiés raspan la parte del cuello de las aves y es como les inyectan su veneno mortal. Este paraliza a las aves por lo que les es imposible defenderse cuando son devoradas vivas.

Fuente: adn40.mx