DestacadaInnovación

Alt-Steak, el filete vegano impreso en 3D en Israel idéntico a la carne

Cada vez son más startups las que presentan propuestas de carne a base de plantas o hamburguesas sintéticas cultivadas en laboratorio. Desde Israel, Redefine Meat lanza Alt-Steak, el primer filete vegano impreso en 3D

Aunque alternativas como Beyond Meat e Impossible Foods sean las caras más visibles y conocidas del mercado global de la carne artificial, cada vez más compañías innovadoras se suman para llevarse un pedazo del pastel y proporcionar un mayor espectro de alternativas a los consumidores. Redefine Meat, una compañía israelí fundada en 2018 bajo el nombre de Jet Eat, acaba de presentar su “Alt-Steak”, de aspecto, textura y sabor indistinguible de la carne. La startup confirma su capacidad de crear filetes sostenibles, ricos en proteínas y sin colesterol gracias a las avanzadas tecnologías de impresión 3D.

La carne de res sintética se probará en restaurantes selectos de alta gama en Israel a lo largo de este 2020 como parte de un sofisticado plato de chef, recibiendo feedback de alto nivel por parte de carniceros y cocineros. Su siguiente paso será la distribución en el mercado en 2021.

La base de estos filetes impresos en 3D es una tecnología patentada y amparada una tinta especial con formulaciones de origen vegetal. La carne está elaborada a partir de proteínas de soja y guisantes, grasa de coco y aceite de girasol, colores y saborizantes naturales.

“Nos acercamos mucho a cómo es la composición de la carne en la naturaleza, y nuestra impresora 3D esencialmente es como un robot muy complicado que sabe cómo tomar cada uno de estos ingredientes y de una manera muy precisa crear un producto alimenticio”, apuntó Ben-Shitrit al diario Times of Israel

Los productos de origen vegetal se combinan con agua y se colocan en tres cartuchos de tinta. Estos cartuchos se cargan en su impresora 3D, que tiene un tamaño similar a una nevera de grandes dimensiones. Tras la ingeniería de alimentos, se expulsa el producto imprimiendo una mezcla de grasa, sangre y carne para obtener la estructura muscular similar a la de una vaca.

Se imprimen hasta un millón de puntos en 3D por filete, cuya tipología está dictada por el software inteligente. Es decir, cada producto puede ser personalizado de forma individual. Las máquinas pueden producir seis kilogramos por hora, por lo que rondarían los 200 kilogramos diarios de esta carne basada en plantas.

El objetivo principal de la compañía no es únicamente crear un plato vegano de textura, sabor y consistencia idéntica a la carne, sino también interrumpir la cadena de suministro de alimentos a nivel mundial, ya que se sabe que la producción de carne tiene un impacto negativo en el medio ambiente. Productos como este pueden reducir la dependencia de la dañina ganadería industrial -causante del cambio climático y vinculada a un mayor riesgo de futuras pandemias– y proporcionar formas alternativas de obtener proteína de forma sostenible y deliciosa.

Fuente: ticbeat.com