Nuevo récord con CRISPR: 13,200 ediciones simultáneas en una célula

Desde su creación, la técnica de edición genética CRISPR ha permitido introducir cambios en el ADN en lugares específicos del genoma. Estos cambios precisos se suelen hacer de uno a uno.

Pero puede que dentro de poco la técnica pise el acelerador. Un equipo de la Universidad de Harvard (EE. UU.) afirma haber realizado 13.200 alteraciones genéticas en una sola célula, un récord para la tecnología de edición genética.

El grupo, liderado por el experto en genética George Church, quiere aumentar la escala actual a la que se reescriben los genomas reescribir los genomas, algo que cree que, en última instancia, podría conducir al “rediseño radical” de especies, incluida la humana.

La edición genética a gran escala ya se había intentado antes. En 2017, un equipo australiano dirigido por el investigador Paul Thomas saturó de ediciones el cromosoma Y de un grupo de ratones hasta eliminar por completo la existencia de dicho cromosoma. Este enfoque está siendo considerado como un posible tratamiento para el síndrome de Down, un trastorno genético causado por la presencia de un cromosoma adicional.

Para establecer el nuevo récord de edición genética, los miembros del equipo Oscar Castanon y Cory Smith usaron CRISPR en un tipo de secuencia de ADN llamada LINE-1, un misterioso elemento repetitivo que se encuentra por todo el genoma humano. Se estima que este tipo de elementos genéticos, que son capaces de copiarse a sí mismos, representan aproximadamente el 17 % de nuestro genoma.

Dado que CRISPR corta la doble hélice del ADN, hacer demasiadas ediciones a la vez podría matar a la célula. Este riesgo ha sido precisamente el que ha limitado los anteriores intentos de edición a gran escala. El investigador de la Universidad de Queensland (Australia) Geoff Faulkner cuenta que en 2016 intentó eliminar los elementos de LINE en 500 embriones de ratón para ver si esto afectaba a su comportamiento. Pero ninguno de los ratones sobrevivió para reproducirse.

Para evitar ese problema, el equipo de Harvard adaptó la versión 2.0 de CRISPR, llamada editor de bases. En lugar de cortar el ADN, esta técnica reemplaza una letra genética por otra, por ejemplo, convierte una C en una T.

De acuerdo con su documento, publicado este mes en la página web de preimpresión BioRxiv, el equipo fue capaz de realizar más de 13.000 cambios de forma simultánea en algunas células sin destruirlas. Faulkner detalla: “Han encontrado una forma de realizar el experimento sin causar una gran inestabilidad en todo el genoma”.

Pero no todos los científicos están tan impresionados, y afirman que el trabajo no representa la “activación” de la edición genética a gran escala que intenta vender. El investigador de la Universidad Nacional de Australia Gaetan Burgio tilda de “exagerada” la idea de que esta técnica conducirá a un rediseño radical de las especies.

Sin embargo, Church considera que la edición genética a gran escala es una forma de limpiar los genomas, pues permite eliminar la basura genética que contienen. En 2015, por ejemplo, este laboratorio eliminó las 62 copias de un retrovirus que se esconde dentro de los genomas de los cerdos. Este tipo de virus puede reactivarse, por lo que crear cerdos que carecen de ellos supone un paso seguro hacia los trasplantes de órganos de cerdo a humano.

eGenesis, una start-up nacida en su laboratorio, ya está creando cerdos con una gran cantidad de ediciones para que sus órganos puedan ser tolerados por los receptores humanos de trasplantes. Church explica que su objetivo final es crear suministros de órganos y tejidos humanos cuyos genomas se modificarían para resultar inmunes a todos los virus. Ese proceso, llamado recodificación, supondría alrededor de 9.811 modificaciones genéticas precisas, según el equipo. Church afirma que el laboratorio comenzó el proceso de recodificación de suministros de sus propias células en el laboratorio. “Están destinadas a ser células madre seguras… y universales”, concluye.

Fuente: tecnologyreview.es