Descifran el código genético de los animales más resistentes

Son los animales más resistentes del mundo, capaces de vivir en cualquier lugar, desde el fondo del océano hasta a 5 mil metros de altura en una montaña del Himalaya. Se les puede hervir a temperaturas hasta de 150 grados Celsius o congelar casi hasta el cero absoluto, y aun así los tardígrados –pequeñas criaturas semejantes a Muppets, también conocidas como osos de agua o puerquitos del musgo– no morirán.

Se les ha encontrado incluso en el exterior de la Estación Espacial Internacional, donde la falta de presión podría matar a un humano en cuestión de minutos. A los tardígrados les resultó acogedor, así que decidieron radicarse allí, tener sexo y producir crías. Ahora, investigadores han descubierto cómo aplican una de sus extraordinarias técnicas de supervivencia.

El doctor Thomas Boothby, de la Universidad de Carolina del Norte, quien encabezó el estudio, señaló: La mayor conclusión de nuestro estudio es que los tardígrados han evolucionado genes únicos, que les permiten sobrevivir al secamiento. Además, las proteínas que estos genes codifican pueden usarse para proteger de la desecación otros materiales biológicos, como las bacterias, las levaduras y ciertas enzimas.

Estas proteínas han sido denominadas TDP, o proteínas intrínsicamente desordenadas específicas de tardígrados, en honor de estas criaturas de un centímetro de largo que evolucionaron para tenerlas. Antes se pensaba que cierto tipo de azúcar llamado trehelosa, que se encuentra en otros organismos, como las artemias, era el secreto detrás de la capacidad de los tardígrados de resucitar de entre los muertos como Lázaro después de haber estado secos hasta 10 años.

Después del descubrimiento, reportado en la revista Molecular Cell, el científico puso los genes en levaduras y bacterias, los cuales ganaron entonces las mismas propiedades de los tardígrados. El doctor Boothby comentó que las TDP podrían utilizarse para proteger cultivos de la sequía y para preservar medicamentos sin necesidad de refrigerador.

“Ser capaz de estabilizar fármacos delicados en estado seco es muy importante para mí en lo personal, añadió. Crecí en África, donde la falta de refrigeración en zonas remotas es un problema enorme. Estas aplicaciones en el mundo real son una de las cosas que me condujeron a estudiar a los tardígrados”.

Fuente: The Independent / La Jornada