Descubren el área del cerebro vinculada a la toma de decisiones
Una nueva investigación realizada por neurocientíficos de la Universidad de Chicago muestra que la corteza parietal posterior (PPC), un área del cerebro que a menudo se asocia con la planificación de movimientos y la conciencia espacial, también desempeña un papel crucial en la toma de decisiones sobre las imágenes en el campo visual, según publican en el último número de la revista ‘Science’.
“Tradicionalmente, se pensaba que esta parte del cerebro estaba involucrada en el control de la atención espacial y en las acciones de planificación. Se ha prestado menos atención a la función que tiene este área del cerebro respeto al procesamiento de los estímulos visuales –explica el doctor David Freedman, profesor de neurociencia en la Universidad de Chicago y autor principal del estudio–. Aquí pudimos demostrar que desempeña un papel importante para dar sentido a las cosas que vemos, quizás inclus más que su papel en la planificación de su próxima acción o dirigir su atención”.
Freedman y el doctor Yang Zhou, investigador postdoctoral, entrenaron monos para jugar a un juego de ordenador simple en el que informaron de sus decisiones sobre diferentes tipos de imágenes mostradas en un monitor al mover sus ojos hacia un objetivo designado.
Por ejemplo, si a los animales se les mostraba un patrón de puntos que se movían hacia arriba y hacia la izquierda, se suponía que debían mover sus ojos hacia un punto verde. Si los puntos se movieran en la dirección opuesta, deberían mover sus ojos hacia un punto rojo.
Para el nuevo estudio, los investigadores probaron si una región específica de la PPC llamada área intraparietal lateral (LIP) estaba directamente involucrada en la orientación de estas decisiones. Les dieron a los animales un medicamento que detuvo temporalmente la actividad neuronal en el área LIP, luego hicieron que los monos realizaran las mismas tareas.
Mientras la droga estaba activa, las decisiones de los monos sobre los patrones visuales que les fueron mostrados se vieron afectadas. Una vez que la droga desapareció, sus decisiones volvieron a la normalidad.
Los investigadores también registraron la actividad en el mismo grupo de neuronas una vez que el fármaco se había agotado y encontraron que la actividad en ese área del cerebro estaba fuertemente correlacionada con los mismos tipos de decisiones que se habían deteriorado durante los experimentos.
Los hallazgos proporcionan un nuevo contexto para ayudar a comprender por qué un estudio de 2016 realizado por otro grupo en ‘Nature’ informó que la desactivación de partes de LIP no parece tener ningún impacto en la toma de decisiones.
Ese estudio solo examinó el papel del LIP en la planificación motriz, como la decisión de mirar hacia la izquierda o hacia la derecha. En cambio, el estudio actual muestra que el LIP está más involucrado en dar sentido a las imágenes visuales que los sujetos están viendo, en lugar de decidir qué acciones deben tomar a continuación.
“Todos los datos neuronales que examinamos en nuestros experimentos anteriores nos llevaron a pensar que este área del cerebro estaba involucrada en el procesamiento del significado de las imágenes visuales durante la toma de decisiones –explica Freedman.– Ahora descubrimos que, de hecho, cuando detenemos temporalmente la actividad en esa parte del cerebro, realmente afecta las partes sensoriales de las decisiones”.
Freedman destaca que el nuevo estudio proporciona una oportunidad para que los neurocientíficos reconsideren los mecanismos cerebrales involucrados en la toma de decisiones, la categorización visual y el procesamiento sensorial y motor.
El trabajo también podría llevar a una comprensión más profunda de cómo el cerebro interpreta las cosas que vemos para tomar decisiones. Comprender este proceso en detalle será fundamental para desarrollar nuevos tratamientos para enfermedades y trastornos cerebrales que afectan la toma de decisiones.
“Estos resultados muestran que la corteza parietal del cerebro es un centro importante para orientar las decisiones, por lo que ahora estamos más motivados para seguir adelante y tratar de resolver los detalles de los circuitos neuronales en esta parte del cerebro que realmente llevan a cabo estos procesos cognitivos”, concluye Freedman.
Fuente: infosalus.com