Científicos descubren nuevas posibles causas de la artritis de células gigantes 

La investigación podría resultar en nuevos tratamientos para esta enfermedad autoinmune que afecta mayoritariamente a mujeres mayores de 50 años.

La arteritis de células gigantes es una enfermedad rara autoinmune de origen desconocido que provoca la inflamación de las arterias. Ahora, un grupo de científicos ha identificado dos nuevos genes de riesgo para padecer esta patología en un estudio publicado por American Journal of Human Genetics. 

El hallazgo, además de ahondar en la comprensión de esta enfermedad, abre nuevas vías para tratar este tipo de vasculitis -inflamación de los vasos de la sangre- difícil de diagnosticar. Javier Martín, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Parasitología y Biomedicina López-Neyra de Granada, fue quien inició las investigaciones de esta patología junto a Miguel Ángel González-Gay, del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla.

Martín explicó que la arteritis de células gigantes es una enfermedad autoinmune que se presenta en personas mayores de 50 años, y que el 80 por ciento de los pacientes son mujeres. Es difícil de diagnosticar por la variedad de sus síntomas: dolor de cabeza, fatiga, fiebre, dolores articulares, anemia y, como problemas más graves, ceguera permanente, aneurismas o ictus. 

En la actualidad la comunidad científica conoce una decena de genes vinculados a esta enfermedad rara, pero los tres más importantes son los dos que se describen en este trabajo y el gen HLA, del que ya se sabía su asociación con la arteritis de células gigantes (está vinculado también a otras enfermedades autoinmunes). “Si conocemos cuáles son las moléculas que están alteradas en estos pacientes podremos conocer mejor cuáles son las vías patogénicas de la enfermedad y desarrollar nuevos fármacos o rediseñar medicamentos ya existentes”, señaló este científico. En este sentido, apuntó que un fármaco utilizado tradicionalmente para la artritis reumatoide se ha probado con éxito para esta enfermedad. Actualmente el estudio está en fase III, la última antes de salir al mercado en esta versión para la arteritis de células gigantes. Martín indicó que el trabajo publicado ahora ha puesto, además, de manifiesto una compleja red de interacción de genes necesarios para el desarrollo de la citada enfermedad. En el centro de esa red está precisamente el gen de la interleucina-6, el gen que bloquea tocilizumab en la artritis reumatoide y ahora en la arteritis de células gigantes.

Fuente: EFE