Ecuatoriana entre las 10 científicas más destacadas de Latinoamérica

La cadena de noticias BBC realizó el especial “100 Mujeres: la mitad del mundo habla”, donde expone los logros y los desafíos de las mujeres a lo largo de la historia. Dentro de esta publicación, resalta un espacio para las 10 científicas más destacadas de Latinoamérica. Una es ecuatoriana.

Eugenia Del Pino, doctora en biología, figura en la lista como una de las científicas más destacadas de la región. Se resalta el aporte de sus estudios, pioneros, sobre la biología del desarrollo de una rana marsupial (Gastrotheca riobambae) típica de Ecuador, en comparación con otras ranas tropicales. Su trabajo abrió una línea de investigación nueva en el ámbito científico internacional. Además, se resalta su esfuerzo por la conservación de las Islas Galápagos. 

La doctora Del Pino es la primera ecuatoriana en ser miembro asociado extranjero de la Academia Nacional de Ciencias en Estados Unidos (desde 2006). “Sus investigaciones científicas en el área de la fisiología reproductiva y del desarrollo de la rana marsupial, única en Ecuador, han hecho una importante contribución al campo del desarrollo de los vertebrados en general”, señaló la Universidad de Emory de EU, y lo cita el sitio web de la BBC.

El Universo se comunicó con la científica ecuatoriana y ella expresó sentirse muy contenta con la designación. “Siendo muy honesta, me dejó sin aliento saber que estaba entre las 10 científicas que representan a América Latina. En la lista hay mujeres de México, Brasil, Argentina, Chile, países con alto desarrollo científico, y estar en esa élite lo considero un honor muy alto”, añadió.

Del Pino se graduó en Biología en la Universidad Católica de Quito (PUCE), luego obtuvo una beca para cursar el Máster de Ciencia en el Vassar College, en Poughkeepsie, Nueva York (1969). Después, ganó obra beca en la Universidad Emory, en Atlanta, donde en 1972 obtuvo su doctorado (PhD). En ese mismo año regresó a Quito como profesora en la PUCE, de acuerdo a su currículum.

La también Miembro Honorario Extranjero de la Asociación Norteamericana de Ictiólogos y Herpetólogos ha comentado en otras publicaciones que eligió el estudio de la ranas, y no de un mamífero, porque las ranas y los seres humanos son muy parecidos a nivel molecular; y por lo tanto su estudio sirve para comprender el desarrollo humano y podría ayudar a prevenir enfermedades.

Ganadora de premio para América Latina de L’Oreal/Unesco 2000 para la Mujer en la Ciencia, Del Pino ha declarado también que el descubrimiento de la rana marsupial fue casi una coincidencia. Ella relata que no es muy buena atrapando animales, pero que una vez encontró en los jardines de la PUCE a una rana  que llevaba a una de sus crías sujeta a su cuerpo. Esto la maravilló y a partir de ahí, junto a su equipo, se concentró en el estudio embrionario de esta especie.

Pero su trabajo no se ha limitado a este anfibio. Del Pino se destacó en el desarrollo de un programa de becas para que estudiantes ecuatorianos realicen investigaciones en Galápagos y tengan acceso a mejor formación científica, comentó a este medio. “Algunos de esos estudiantes han sido líderes en el país y en el continente”, añade con alegría.

En 1986, el Fondo Mundial para la Conservación de la Naturaleza le otorgó un diploma por su trabajo en beneficio de las Islas; y en 1999, la Fundación Charles Darwin le otorgó una medalla en reconocimiento por su trabajo en la conservación de las Encantadas.

Durante la entrevista vía telefónica, la científica ecuatoriana comentó que recientemente se acogió a la jubilación; sin embargo, aclaró que su trabajo no ha culminado. Ella continúa con sus investigaciones en la PUCE. Al pedirle un mensaje para las mujeres ecuatorianas, ella expresó: Nosotras somos seres privilegiados. Tenemos sensibilidad e inteligencia. Podemos superarnos y apoyar al desarrollo del país desde muchos ángulos. Quiero dar palabras de aliento para que hombres y mujeres de Ecuador den lo máximo de sus potencialidades para el beneficio propio y del país”.

Científicas destacadas de Latinoamérica

La lista de las 10 científicas más destacadas de Latinoamérica se completa con la bióloga argentina Raquel Chan, directora del Centro Científico Tecnológico del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Cinicet) de la provincia de Santa Fe, quien lideró el equipo que creó una semilla más resistente a la sequía y que hace a los cultivos más tolerantes a la salinidad del suelo. Con este descubrimiento, según el gobierno de Argentina, se podría duplicar la productividad de soja, trigo y maíz.

También figura la bióloga boliviana Kathrin Barboza, investigadora del Programa para la Conservación de los Murciélagos de Bolivia y la Red Latinoamericana para la Conservación de Murciélagos. La tercera bióloga de la lista es Diana Bolaños, colombiana, cuyas investigaciones sobre gusanos marinos podrían ayudar al desarrollo de técnicas para reemplazar o renovar estructuras o tejidos en los seres humanos.

La física brasileña Marcia Barabosa fue reconocida por descubrir una peculiaridad del agua que puede conducir a un mejor entendimiento de cómo ocurren los terremotos y de las proteínas en el líquido, un proceso clave en el tratamiento de enfermedades, según la Unesco.

María Teresa Ruiz, astrónoma, representa a Chile por sus descubrimiento de la primera enana café (súper planeta) jamás observada; entre otros hallazgos como “una supernova en el acto de explotar” y el de “dos nebulosas planetarias en el halo de nuestra galaxia”, según cita la BBC.

Cuba está representada por la bioestadística María Amparo Pascual, directora del Centro Nacional Coordinador de ensayos clínicos de Cuba (CENCEC); y de México se destaca a la investigadora biomédica Susana López, quien ha sido clave en el estudio, diagnóstico y vacuna de un rotavirus que causa la muerte de 600 mil niños al año en el mundo, según describe la Unesco.

La bióloga marina Idelisa Bonelly, de República Dominicana, es considerada la madre de la conservación marina en el Caribe. En 1995, el Programa de la ONU para el Medio Ambiente le concedió el Premio Global 500, por haber ayudado a crear en 1986 el santuario de ballenas jorobadas del Banco de la Plata, el primer santuario en el Atlántico Norte para estas especies en peligro de extinción.

La decena de científicas destacadas de Latinoamérica se cierra con Maylyn Sánchez, física venezolana profesora de la Universidad del Estado de Iowa (Estados Unidos). Ella lidera un equipo que estudia los neutrinos (partículas muy pequeñas sin carga), con el objetivo de entender la composición de universo y desarrollar tecnologías para diagnósticos médicos. En el 2012, Sánchez estuvo entre los ganadores del PECASE, un premio que otorga la Casa Blanca a jóvenes científicos.

Fuente: eluniverso.com