Entre las hienas, las redes sociales se heredan

Las hienas son una especie muy social que vive en grupos que pueden superar el centenar, pero dentro de sus clanes hay orden, una jerarquía matrilineal específica. Ahora, una nueva investigación ha constatado que las crías heredan las redes sociales de sus madres.

Esta es la principal conclusión de un estudio que ocupa la portada de la revista Science dirigido por biólogos de la Universidad de Pensilvania (EE.UU.), el cual se basa en 27 años de observaciones detalladas del comportamiento social de las hienas recopiladas por expertos de la Universidad Estatal de Michigan.

Los hallazgos muestran que las hienas heredan las redes sociales de sus madres, por lo que sus conexiones sociales se asemejan a las de estas, resumen los autores, que destacan no obstante que las crías de las hienas de mayor rango reproducen más fielmente estas interacciones.

Ellas acaban teniendo redes sociales más parecidas a las de sus madres que las crías de las hienas de menor rango en la escala social del clan.

“Sabíamos que la estructura social de las hienas se basa en parte en el rango de la jerarquía agonística, que sabemos que se hereda de las madres”, dice Erol Akçay, pero “lo que encontramos, que las interacciones afiliativas o amistosas también se heredan, no se había demostrado”.

Amiyaal Ilany, también autor e investigador en la Universidad Bar-Ilan de Israel, añade: “Se trata de un proceso muy simple de herencia social que demostramos que funciona muy, muy bien”.

“Los individuos que han nacido en un rango superior son más precisos en su herencia”, añade este profesor, quien recuerda: “Hay reglas muy estrictas sobre el lugar que ocupas en la jerarquía si eres una hiena”.

El trabajo se basa en un modelo teórico de herencia de redes sociales que Akçay e Ilany desarrollaron en 2016. Según este, los animales establecen sus redes por “herencia social” o copiando los comportamientos de su madre.

Para poner a prueba el modelo, los científicos se asociaron con Kay Holekamp, de la Universidad Estatal de Michigan, que había pasado 27 años observando hienas manchadas salvajes en Kenia. Los investigadores analizaron casi 74.000 interacciones sociales.

Ilany explica que este uso de la proximidad para rastrear las redes sociales no es posible en humanos, ya que dos extraños pueden entrar juntos en un ascensor al azar, “pero con las hienas, si un individuo se acerca a pocos metros de otro, eso sugiere que tienen una conexión social”.

Los investigadores compararon las redes sociales de las madres con sus crías y desarrollaron una nueva métrica para medir la herencia social.

Los cachorros de hiena se mantienen cerca de sus madres durante los dos primeros años de vida, por lo que las redes de las madres y sus crías fueron bastante similares al principio.

Sin embargo, observaron que incluso cuando las crías dejaban de pasar tanto tiempo cerca de sus madres, seguían manteniendo redes bastante similares, sobre todo en el caso de las crías hembras, que generalmente siguen siendo miembros del clan de por vida. Este patrón era especialmente fuerte para las madres de mayor rango.

El rango social también influyó en la supervivencia y el éxito reproductivo, señalan sendas notas de las universidades.

El equipo descubrió que las parejas de madres y crías con redes sociales más similares también vivían más tiempo. Este efecto sobre la supervivencia puede deberse a que las crías que pasan más tiempo con sus madres y, por tanto, reproducen sus redes sociales, se benefician de los mayores cuidados.

Fuente: EFE