Descubren en ratones cómo afecta a la memoria la exposición al alcohol durante el embarazo

Investigadores de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) han descubierto, en ratones, el mecanismo neurobiológico y la terapia para corregir el déficit en la memoria de los individuos jóvenes que estuvieron expuestos al alcohol durante el embarazo y la lactancia, lo que abre la puerta a futuros estudios para conseguir curas para estas personas.

Según ha explicado la UPF este miércoles en un comunicado, el Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF) surge por exponerse al alcohol durante el embarazo o la lactancia, e incluye muchas posibles afectaciones, desde dificultades emocionales, en los casos leves, hasta malformaciones físicas importantes, en casos severos.

Los resultados muestran que los ratones nacidos de madres que han tenido un consumo esporádico de alcohol durante el embarazo y la lactancia presentan déficit de memoria que se mantiene hasta la edad adulta.

“No hace falta una exposición crónica al alcohol para que se dé una TEAF. Un consumo puntual con intoxicación, o una borrachera, es suficiente para ver alteraciones en la memoria de los ratones”, ha advertido la coordinadora del estudio, Olga Valverde.

En cuanto al tratamiento, el estudio propone el fármaco pioglitazona, usado habitualmente para controlar el azúcar, que, según la autora principal del estudio, Alba Garcia-Baos, “consigue reducir los déficits continuos de memoria en niños y niñas con TEAF”.

Según ha puntualizado Valverde, los investigadores únicamente han estudiado las alternaciones en la memoria, pero quedan aún por analizar otras alternaciones emocionales, conductuales o motivacionales relacionadas con el TEAF.

Además, aunque el estudio solo se ha hecho en ratones, Valverde ha dicho que puede ser “relativamente fácil” comprobar la terapia en humanos: “Los ratones y las personas somos especies de mamíferos con muchas similitudes, y ya existen fármacos con efectos similares que están aprobados para usarse en población infantil”.

Fuente: EFE