Descubren cómo una molécula de azúcar puede afectar a la respuesta del cáncer a la quimiorradioterapia
Investigadores del Centro Oncológico Integral Lombardi de la Universidad de Georgetown (Estados Unidos) que han explorado las complejidades de las vías bioquímicas implicadas en el desarrollo del cáncer han descubierto que una forma de glucosa, un tipo de azúcar, está estrechamente vinculada a una vía utilizada para construir moléculas de ADN.
Cuando esta vía está hiperactiva, puede provocar cáncer y resistencia a la quimiorradioterapia, según publican en la revista ‘Nature Chemical Biology’.
«Desde hace tiempo, mi laboratorio explora los mecanismos de señalización celular y transcripción del ADN por los que el metabolismo celular cambia en respuesta a señales ambientales y genéticas, con el objetivo de diseñar estrategias para tratar el cáncer y otras enfermedades», explica Huadong Pei, profesor asociado del Departamento de Oncología de Georgetown Lombardi y autor de la publicación.
«Saber que las células cancerosas suelen crecer rápidamente y necesitan más glucosa que las células normales para reprogramar su metabolismo ha sido clave para poner en marcha este último esfuerzo de investigación con la esperanza de que podamos comprender mejor cómo podemos combatir el cáncer a nivel celular, o incluso subcelular», añade.
La investigación actual de Pei comenzó cuando él y sus colegas estudiaron cómo los nutrientes que las células engullen para mantenerse vivas acaban provocando modificaciones en las proteínas como resultado de la adición de un azúcar llamado beta-N-acetilglucosamina ligada a O (O-GlcNAc) a la proteína.
Esta modificación dinámica y reversible se perfila como un regulador clave de diversos procesos celulares. En una serie de experimentos tanto en laboratorio como en ratones, los investigadores pudieron determinar que hay una importante enzima implicada en la síntesis de nucleótidos, llamada fosforibosil pirofosfato sintetasa 1 (PRPS1), que está modificada por O-G1cNAc. Los investigadores creen que atacar al azúcar o a la enzima podría ser clave para influir en la evolución del cáncer.
«En última instancia, nos gustaría poder diseñar fármacos dirigidos a la síntesis de nucleótidos del ADN, que incluye las modificaciones que hemos identificado de añadir un azúcar a una proteína y el paso catalizador en el que actúa la enzima PRPS1», explica Pei.
«En concreto –anuncia–, nos gustaría desarrollar fármacos que puedan utilizarse para hacer que el cáncer de pulmón sea más sensible, o responda mejor, a la radioterapia y la quimioterapia, ya que la resistencia a estas terapias sigue siendo demasiado frecuente. Pero aún queda mucho camino por recorrer, y serán necesarios muchos más experimentos antes de que podamos siquiera plantearnos el diseño de fármacos».
Mientras tanto, el siguiente paso de los investigadores es empezar a examinar las aplicaciones de sus hallazgos en modelos animales utilizando ratones injertados con tejido de cáncer de pulmón humano para ver si los fármacos dirigidos a la síntesis de nucleótidos sensibilizan el cáncer de pulmón a la radioterapia y la quimioterapia.
Fuente: infosalus.com