Más de un millón de personas murieron en 2017 por una intoxicación por las pinturas con plomo

El Instituto de Evaluación y Métrica de la Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha avisado de que en el año 2017 más de un millón de personas fallecieron por una intoxicación por pinturas que contenían plomo y, además, se produjeron 24,4 millones de años perdidos por discapacidad debido a efectos a largo plazo en la salud.

Aunque existe un amplio reconocimiento de los efectos nocivos del plomo y muchos países han tomado medidas, la exposición al plomo, particularmente en la infancia, sigue siendo una “preocupación” para los sistemas sanitarios de todo el mundo. Y es que, las pinturas que contienen altos niveles de plomo siguen estando ampliamente disponibles y se emplean en muchos países con fines decorativos, a pesar de que ya existen alternativas que no contienen plomo adicional.

La Alianza Global para Eliminar la Pintura con Plomo se formó en 2011 para promover la eliminación gradual de la fabricación y venta de pinturas que contienen plomo y, finalmente, eliminar los riesgos que plantean dichas pinturas. En este sentido, la OMS ha avisado de que un requisito clave para lograr esto es el establecimiento de marcos regulatorios nacionales apropiados para detener la fabricación, importación, exportación, distribución, venta y uso de pinturas con plomo y productos recubiertos con pinturas con plomo.

Al eliminar la pintura con plomo, los países contribuirán al logro de los siguientes objetivos del Objetivo de Desarrollo Sostenible: reducir sustancialmente la cantidad de muertes y enfermedades por productos químicos peligrosos y la contaminación y contaminación del aire, el agua y el suelo; lograr el manejo ambientalmente racional de los productos químicos y todos los desechos a lo largo de su ciclo de vida, y reducir significativamente su liberación al aire, agua y suelo para minimizar sus impactos adversos en la salud humana y el medio ambiente.

El plomo tiene consecuencias “devastadoras” para la salud

Por todo ello, la OMS ha lanzado, con motivo de la Semana de Acción Internacional para la Prevención del Envenenamiento por Plomo, una campaña para aumentar la conciencia sobre los efectos del envenenamiento por plomo en la salud; destacar los esfuerzos de los países y socios para prevenir el envenenamiento por plomo infantil; e instar a realizar más acciones para eliminar la pintura con plomo a través de acciones regulatorias a nivel de país.

“El plomo tiene consecuencias devastadoras para nuestra salud y en particular para la salud de nuestros niños, causando discapacidades intelectuales de por vida”, ha dicho la directora del Departamento de Salud Pública que se ocupa de los factores sociales y ambientales, en la OMS en Ginebra, Maria Neira.

Al mismo tiempo, la ONU ha alertado de que la pintura con plomo en descomposición puede contaminar el suelo o el polvo, lo que significa que los niños pequeños también pueden ingerirla mientras juegan en el suelo. Y es que, el plomo se almacena en los dientes y huesos y se acumula con el tiempo, afectando múltiples sistemas del cuerpo. Se distribuye al cerebro, hígado, riñón y huesos. A medida que el sistema nervioso de los niños pequeños aún se está desarrollando, pueden absorber hasta cinco veces más plomo que los adultos.

“El plomo perjudica el desarrollo cerebral infantil, lo que podría conducir a un coeficiente intelectual reducido. También dará lugar a cambios de comportamiento, como la reducción de la capacidad de atención, el aumento del comportamiento antisocial y, a veces, incluso el logro educativo reducido. Los impactos pueden extenderse hasta la edad adulta2, ha zanjado el doctor.

Fuente: infosalus.com