Describen dos especies nuevas de insectos palo que se hacen notar
Los fásmidos, o insectos palo, cuyo aspecto recuerda a una ramita, un tallo espinoso o una corteza, son a todas luces unos campeones del camuflaje. Pero el equipo de Frank Glaw, de la Colección Estatal Zoológica de Múnich, ha descrito ahora dos especies nuevas halladas en Madagascar, Achriopteramanga y Achriopteramaroloko, ninguna de las cuales pasa inadvertida. Ambas miden más de 20 centímetros de largo, lo que las sitúa entre los insectos de mayor tamaño y, además, el macho, lejos de camuflarse, luce vivos colores.
El macho de estos dos insectos insólitos (cuyo género, Achrioptera, engloba a una docena de especies, todas ellas africanas) no recurre en absoluto al camuflaje: A.manga es de un color azul intenso y una parte de sus patas son amarillas (imagen inferior), mientras que A.maroloko llama la atención por su cuerpo amarillo provisto de alas negras (página siguiente). Pero, entonces, ¿cómo escapan de las aves y otros insectívoros?
Glaw propone una explicación evolutiva. Al igual que ocurre, por ejemplo, con ciertas ranas sudamericanas, los brillantes colores de los machos de estas dos especies de fásmidos podrían transmitir el mensaje «¡cuidado, soy muy tóxico!», un fenómeno que se conoce como aposematismo. Una posibilidad es que los linajes de A. manga y A. maroloko evolucionaron de tal forma que los machos habrían adquirido, poco a poco, inmunidad frente al veneno de las plantas que consumían, y estas toxinas serían, a su vez, responsables de su coloración. Las hembras de estas dos especies, que, por el contrario, siguen siendo de un color críptico que les permite camuflarse, podrían haber seleccionado esta peculiar defensa antidepredadora eligiendo aparearse, de forma sistemática, con machos vistosos.
Fuente: investigacionyciencia.es