Captan por primera vez a una descomunal tarántula atacando y devorando a una zarigüella [VIDEO]

“Al principio pataleaba, pero en apenas 30 segundos dejó de moverse.” El biólogo Michael Grundler describe de esta cruda manera los últimos momentos de un opósum cazado por una tarántula del tamaño de un plato. La escena sucedía en el Amazonas, y es la primera vez que se observa.

El inquietante vídeo forma parte de un exhaustivo estudio de campo llevado a cabo por Grundler y su equipo en la selva amazónica. Los investigadores llevan años observando el eterno ciclo entre depredadores y presas en este complejo ecosistema y acaban de publicar sus resultados.

Resulta que la selva amazónica no es el mejor lugar del mundo para tener una esperanza de vida larga si eres un pequeño vertebrado. Eso no es del todo inesperado. Lo realmente sorprendente es que las vidas de lagartos, ranas, ratones u opósums no suelen terminar en las fauces de un gran depredador, sino entre las mandíbulas de las diferentes especies de artrópodos de gran tamaño que habitan la selva. En otras palabras, que los principales depredadores de animales de pequeño tamaño son sobre todo arañas y ciempiés.

Prácticamente todos los avistamientos de interacciones entre depredador y presa suceden a nivel de suelo y en plena noche. Los vídeos e imágenes (algunas bastante terribles) se obtuvieron en las regiones de Loreto y Madre de Dios, al norte de Perú. En el caso del opósum, los investigadores escucharon un sonido de agitación en las hojas del suelo y enfocaron con la linterna. En ese momento vieron una tarántula del orden de los Mygalomorphae del tamaño de un plato llano sobre el cuerpo de un opósum joven que ya se debatía presa del veneno paralizante de la araña. Un experto en opósum del Museo Americano de Historia Natural confirmó más tarde que se trata del primer caso de una de estas arañas atacando a un opósum del que se tiene constancia en vídeo.

Los resultados del estudio acaban de publicarse en la revista Amphibian & Reptile Conservation. Aparte de ser útiles para el estudio del ecosistema, confirman que la selva es un lugar terrorífico si apenas mides unos pocos centímetros.

Fuente: es.gizmodo.com