Mini observatorio solar de bajo costo será probado en un globo

El Southwest Research Institute (SwRI) pondrá a prueba un observatorio solar en miniatura de alta precisión, de sólo 72 kilos de peso, en una misión a bordo de un globo.

“Financiado por la NASA, el SSIPP (SwRI Solar Instrument Pointing Platform) está basado en una plataforma óptica reutilizable. Este nuevo enfoque elimina barreras a la ciencia, al permitir la investigación solar de bajo costo”, han señalado los científicos del proyecto.

SSIPP recoge datos solares utilizando infrarrojos, ultravioleta, o instrumentos de luz visible en una mesa óptica, similar a los utilizados en los observatorios terrestres pero a partir de un entorno de espacio cercano.

Además, este observatorio proporciona el equivalente de precisión óptica al de observar una moneda a 1.6 kilómetros de distancia. Originalmente concebido para volar a bordo de un cohete suborbital comercial, SSIPP ahora ha sido adaptado para el vuelo en globo. La recopilación de datos desde el borde del espacio -alrededor de 32 kilómetros por encima de la superficie de la Tierra- evita las distorsiones de la imagen.

Un costo ‘relativamente bajo’

“SSIPP podría apoyar el desarrollo de una gama de nuevos instrumentos para el medio ambiente del espacio cercano a un coste relativamente bajo”, ha explicado DeForest.

Durante la próxima demostración, los científicos tardarán dos horas en la puesta en marcha del observatorio para buscar firmas visibles de alta frecuencia de las ondas sonoras solares, que son en realidad unas ocho octavas más bajas de las notas sonoras más profundas. Por el contrario, las ondas de sonido más estudiadas en el Sol (los ‘modos-P’ que se utilizan para sondear el interior del Sol) son cinco octavas aún más profundps.

La superficie del Sol está cubierta con células de convección granular. Continuamente, cada 5 minutos, un millón de estas células entran en erupción y crean ondas de sonido en un intervalo de frecuencias. SSIPP captará la imagen de la atmósfera solar para entender sus propiedades de calor y ruido. La relativamente alta frecuencia de las ondas de ultrasonido “solar” las hace indetectables por los observatorios terrestres.

“La transferencia de calor a la superficie de nuestra estrella es un proceso violento –ha explicado DeForest–. Las ondas de sonido calientan la atmósfera solar con temperaturas extremadamente altas, pero es un proceso mal entendido. Las mediciones del infrasonido solar existentes no pueden dar cuenta de toda la energía que se requiere”.

Fuente: Europa Press