Científicos noruegos envían robots a buscar oro en el lecho marino

El fondo del mar es uno de los pocos territorios inexplorados que quedan en la tierra y, muy probablemente, contienen yacimientos de metales preciosos de un volumen que ya no se encuentran en tierra firme. Por ello, se puede decir que el futuro de la minería se encuentra bajo el agua. Equipos de científicos ya están investigando estas posibilidades, gracias a avanzados medios tecnológicos como robots submarinos.

El lecho marino es, probablemente, la última frontera de la tierra. Y de cara a la minería de metales preciosos, se trata de su futuro, ya que no es previsible que en tierra firme se puedan descubrir grandes yacimientos de oro como el de Witwatersrand, en Sudáfrica, de donde se ha extraído la mayor cantidad del oro conocido.

La necesidad de mantener el nivel de la producción de metales preciosos, debido al crecimiento de la demanda, ha impulsado diversas investigaciones cuyo campo de experimentación es el lecho marino.

Es el caso de un equipo de científicos de la Universidad de Bergen (Noruega), que están enviando robots de exploración teledirigidos a más de 2.500 metros de profundidad, entre Noruega y Groenlandia, para investigar la composición del lecho marino, que podría contener metales preciosos y otros minerales.

Según uno de estos investigadores, Thibaut Barreyre, “el lecho marino es desconocido en su mayor parte: sabemos mucho más acerca de la superficie de la Luna o de Marte, gracias a la exploración y las imágenes de diversos satélites, que sobre esta parte de nuestro propio planeta”.

El equipo de investigación, compuesto por científicos de varios países, utiliza una avanzada tecnología, con robots autónomos y submarinos pilotados para explorar las oscuras profundidades del océano, donde existen yacimientos de cinc, oro y cobre.

Los científicos esperan que las exploraciones permitan revelar qué zonas contienen minerales y cuáles no, qué cantidad de mineral se acumula en el lecho marino y qué daños medioambientales podría provocar su explotación.

Se especula con que el lecho marino pueda contener los denominados “rare earth metals” (un grupo de 17 metales muy poco habituales, entre los que se encuentran el cerio, el itrio y el neodimio), utilizados en la fabricación de pantallas de smartphones, dispositivos magnéticos, lentes de cámaras y máquinas de rayos X.

Estos metales son muy escasos y, por lo tanto, muy valiosos, por lo que su posible explotación submarina podría resultar rentable económicamente.

Pero aún existen muchas dificultades. Los científicos han observados que algunas muestras de agua son ricas en oro, cobre, cinc y estos metales raros. Sin embargo, otras apenas contienen trazas, por lo que los investigadores están tratando de averiguar a qué se deben esas diferencias.

El proyecto tiene una duración prevista de cinco años.

Fuente: oroinformacion.com