El sistema digestivo del gusano Tenebrio Molitor convierte el unicel en materia orgánica que se utiliza para elaborar harina, indicó la UNAM

El unicel tarda alrededor de 800 años en degradarse, pero un gusano es capaz de asimilarlo y convertirlo en materia orgánica con la que se elabora harina para ganado, aseguró la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Diego Hernández Martínez, alumno de la Licenciatura en Ciencias de la Tierra, de la Facultad de Ciencias (FC) de la UNAM, expuso que a través del proyecto “Gusani” es posible obtener un alimento nutritivo para el ganado.

“La materia orgánica que produce el gusano se utiliza para elaborar una harina rica en proteína, económica y sustentable”, añadió el estudiante, responsable del proceso de crianza y manufactura del producto.

Hernández Martínez mencionó que en el proyecto “Gusani” se utiliza un insecto de la especie Tenebrio Molitor, que vive entre las rocas, troncos y en algunos almacenes de granos.

El gusano se coloca en cajas de unicel que diferentes industrias utilizan para transportar cárnicos y pescado, las cuales son recolectadas por los integrantes del proyecto.

“Cuando el unicel entra al sistema digestivo del Tenebrio Molitor, rompe las cadenas de carbono y las reacomoda para convertirlas en materia orgánica”, precisó el estudiante de la UNAM.

Materia orgánica del gusano podría servir para elaborar galletas

De acuerdo con el responsable de “Gusani”, este trabajo sería capaz de aportar diversos beneficios, como reducir el impacto de carbono del unicel, ya que este elemento se reinsertaría a la red trófica (cadenas alimentarias interconectadas en un ecosistema).

“Adicionalmente reduciríamos la cantidad de agua utilizada en la agricultura, porque buscamos sustituir a la soya (segunda causa de deforestación en el mundo), como alimento principal del ganado”.

El universitario indicó que por ahora “Gusani” se enfoca en la producción de alimento para ganado; sin embargo, la harina que se obtiene gracias al gusano Tenebrio Molitor podría utilizarse para elaborar comida para humanos, como galletas y otros productos.

“Es una gran fuente de proteína, similar a la contenida en el grillo, incluso puede manejarse como suplemento alimenticio para personas que acuden a ejercitarse al gimnasio, o simplemente como un nuevo ingrediente en la cocina”, apuntó el estudiante de la UNAM .

En el proyecto “Gusani” también participan Salvador García Puebla y Laura Daniela Rivera Granados, del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, así como Mitzi Dayana Cerezo Pérez, de la Universidad Politécnica del Valle de México.

Finalmente, la UNAM señaló que el consumo anual de unicel en México es de 125 mil toneladas, de las cuales 25 por ciento se destinan a la fabricación de productos desechables para la industria alimentaria y el resto, para el sector de la construcción y embalaje.

Fuente: tvazteca.com