Descubren en Marte rocas que podrían probar que el planeta albergó vida
Han sido encontradas en el cráter de Jezero por el robot Perseverance de la NASA, que lo estudia desde febrero de 2021
El robot Perseverance de la NASA ha descubierto en Marte rocas que parecen haber sido alteradas por el agua y que podrían probar si en el pasado el planeta albergó vida.
Concretamente, se han hallado rocas ígneas (magmáticas) y con modificaciones acuosas en la base del cráter de Jezero, según ha señalado a Efe el científico español Juan Manuel Madariaga, de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).
En ellas se han encontrado, «por sorpresa», sales cuya presencia en entornos ígneos solo se pueden hallar porque «en algún momento estuvieron en contacto con el agua».
Perseverance estudia desde febrero de 2021 el cráter de Jezero, al norte del ecuador marciano y formado por el impacto de un superbólido. La presencia de ríos que atravesaron la pared del cráter lo habrían convertido en un lago y, un tiempo después, se registraron elementos de vulcanismo.
Los últimos descubrimientos del rover han sido publicados este jueves en cuatro artículos en las revistas científicas Science y Science Advances. En ellos han participado Madariaga y Alberto González Fairén, del Centro de Astrobiología (CAB).
Las muestras llegarán a la Tierra en 2033
Las muestras seleccionadas por el robot en la misión de la NASA y de la Agencia Espacial Europea (ESA) llegarán posiblemente a la Tierra en 2033 para ser analizadas en el laboratorio y obtener respuestas concretas.
El ambicioso plan requiere la construcción del primer vehículo que pueda lanzarse desde la superficie de Marte y reunirse con un orbitador que transporte las muestras de vuelta a la Tierra.
Los descubrimientos del rover, que está ahora en la base del cráter a unos dos kilómetros del antiguo delta, pueden proporcionar también pruebas para establecer una cronología de su historia geológica.
Dado que las muestras de roca tomadas en el fondo del cráter son probablemente anteriores al delta del río, la datación de estas rocas proporcionará información importante sobre la edad del lago.
Inesperados hallazgos sobre el cráter de Jezero
En su composición, la base de Jezero es distinta a lo encontrado en otras zonas adyacentes y «esa es una de las grandes preguntas que hay que resolver, qué se produjo para que haya esas diferencias», ha enfatizado Madariaga respecto a otros inesperados hallazgos gracias al robot.
El primer «gran fenómeno no esperado» es que no se han encontrado rocas sedimentarias, en contra de «la gran hipótesis de partida» porque fue un lago. Por el contrario, lo hallado son rocas ígneas.
Gracias al instrumento Meda, un analizador de la dinámica ambiental a bordo de Perseverance y liderado por el español Centro de Astrobiología, se ha observado que en el cráter hay vientos mucho más fuertes que en otras localizaciones y remolinos, por lo que la falta de rocas sedimentarias respondería a una fuerte erosión por el viento combinada con la necesaria erosión química.
Los investigadores barajan dos hipótesis sobre el origen de estas rocas, que fueran resultado de eventos volcánicos en el cráter o que hayan sido generadas por corrientes de lavas externas que entraran en él. Igualmente, habrá que esperar a los exámenes de laboratorio para tener más datos.
Fuente: rtve.es