Confirman la detección de oxígeno atómico en la atmósfera de Venus

La concentración es mucho menor que en la Tierra: nuestro planeta tiene aproximadamente 10 veces más oxígeno atómico en su atmósfera

El oxígeno atómico se produce en el lado diurno de Venus, mediante la fotólisis del dióxido de carbono y el monóxido de carbono: aunque previamente se había detectado oxígeno en el lado nocturno del planeta infernal, la identificación diurna significa que tenemos nuevos conocimientos sobre la dinámica de la atmósfera venusina y sus patrones de circulación química.

En un nuevo estudio publicado recientemente en la revista Nature Communications, el Dr. Heinz-Wilhelm Hübers, investigador del Centro Aeroespacial Alemán, confirmó junto a sus colegas la identificación de oxígeno atómico en el lado diurno de Venus. Los investigadores creen que la concentración de este compuesto químico, que ya había sido detectado previamente en el lado nocturno del planeta, no constituirá un riesgo importante de oxidación para las naves espaciales y satélites que podrían atravesar esa zona del Sistema Solar en futuras misiones dirigidas a Venus.

Tan parecidos y tan distintos

Sabemos que el Sistema Solar tiene dos planetas notablemente similares y a la vez muy diferentes: la Tierra y Venus. Se cree que poseen la misma edad, son comparables en tamaño y probablemente están formados por los mismos materiales. Sin embargo, también existen grandes diferencias entre estos dos cuerpos planetarios.

Por un lado, la Tierra tiene un cielo azul, océanos de agua líquida rebosantes de vida y una atmósfera rica en oxígeno. Por el contrario, Venus está rodeado por una densa capa de nubes y una atmósfera que incluye dióxido de carbono, nitrógeno y varios gases traza: debido a esto se lo conoce con el apodo de “planeta infernal” o “gemelo maldito” de nuestro planeta.

Oxígeno atómico por todas partes

Ahora, la concentración de oxígeno atómico en los lados diurno y nocturno de la atmósfera venusina se ha medido directamente por primera vez, utilizando un espectrómetro de infrarrojo lejano que se encuentra a bordo del Observatorio Estratosférico de Astronomía Infrarroja (SOFIA). Mediante estas instalaciones alemanas, los investigadores midieron 17 posiciones en Venus: 7 en el lado diurno, 9 en el lado nocturno y 1 en el terminador, que es la zona de transición entre ambos lados.

Según una nota de prensa, los científicos detectaron oxígeno atómico en todos los puntos observados y descubrieron que se concentraba en altitudes de unos 100 kilómetros. El oxígeno atómico es importante para la fotoquímica y el equilibrio energético de la atmósfera de Venus: los especialistas comprobaron que su concentración es notoriamente menor a la existente en la Tierra, ya que nuestro planeta tiene aproximadamente 10 veces más oxígeno atómico en su atmósfera que Venus.

Vale recordar que el oxígeno atómico es el “primo químico” altamente reactivo del oxígeno molecular, aquel que respiramos y al que simplemente nos referimos como oxígeno. Mientras el oxígeno molecular está formado por pares de átomos de oxígeno, el oxígeno atómico está compuesto de átomos de oxígeno individuales.

No es un peligro para futuras misiones espaciales

¿Cómo se forma el oxígeno atómico en Venus? En la atmósfera de Venus hay dos fuertes corrientes: por debajo de aproximadamente 70 kilómetros, soplan vientos huracanados en dirección contraria a la rotación del planeta, pero en alturas superiores a los 120 kilómetros se registran intensos vientos en la dirección de rotación. Entre estas dos corrientes atmosféricas opuestas se forma una capa de oxígeno atómico, debido a que la radiación ultravioleta del Sol descompone el dióxido de carbono y el monóxido de carbono, produciendo oxígeno atómico y otros compuestos.

De acuerdo a un artículo publicado en Space.com, la concentración relativamente alta de oxígeno atómico en la atmósfera que rodea a la Tierra se considera una amenaza: estas partículas son responsables de cierta corrosión de los satélites en órbita terrestre baja (LEO), incluida la Estación Espacial Internacional (ISS). Sin embargo, la presencia de oxígeno altamente reactivo en Venus, pero en una concentración menor, no debería representar una gran amenaza corrosiva para los futuros satélites y naves espaciales que se envíen hacia el planeta infernal.

Por otro lado, según un artículo publicado en Phys.org, el equipo de investigación también sugiere que el oxígeno atómico en la atmósfera de Venus probablemente tenga un efecto de enfriamiento en el planeta: cuando átomos individuales de oxígeno chocan con otras moléculas, como el dióxido de carbono, la energía se transfiere a la molécula, que luego se irradia. El resultado de este proceso es un enfriamiento de las capas superiores de la atmósfera venusina.

Fuente: levante-emv.com