La terminal para cobro con tarjeta ha venido evolucionando desde hace décadas. Desde el dispositivo análogo que generaba una copia en papel carbón de la tarjeta en cuestión, hasta terminales con conexión a internet. Sin embargo, había algo que quedaba sin evolucionar: solo los bancos podían distribuir terminales. Esto por supuesto quería decir que solo las grandes empresas podían tenerlas, ya que los costos y rentas del equipo son muy elevados. Pero eso ya cambió.

Ahora un pequeño negocio o profesionista independiente puede adquirir una terminal de tarjetas y cabe literalmente en la palma de su mano. Empresas como Billpocket han hecho esto posible gracias a un lector móvil, una aplicación de software y la tecnología Bluetooth. El tamaño, el alcance, los costos y la tecnología definitivamente han cambiado gracias a este avance.

Primero, el lector de tarjetas se adquiere en línea directamente en la página de Billpocket con un valor de $799 y se envía a cualquier parte de México, el usuario debe descargar la aplicación móvil de Billpocket disponible en App Store y Play Store para dispositivos iOS y Android.

Hacer un cobro es muy sencillo e intuitivo; el lector se conecta vía Bluetooth al smartphone o tablet y al abrir la aplicación, el comerciante puede recibir pagos con tarjetas de crédito y débito y vales electrónicos.

El cliente o comprador puede ver la transacción en la pantalla del dispositivo y firmar con el dedo el recibo de compra, posteriormente el ticket de la transacción se puede enviar por medio de correo electrónico o por SMS.

Todos los procesos se hacen de manera digital e inalámbrica, sin necesidad de imprimir recibos. El comerciante puede revisar y administrar su historial de transacciones y además puede recibir tarjetas de todos los bancos mexicanos y ofrecer pagos a meses sin intereses.

Esta tecnología ha democratizado el pago con tarjeta y ayuda a que más negocios tengan la oportunidad de aumentar sus ventas y su flujo de efectivo. En cuanto a la seguridad, Billpocket es regulado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, por lo que todas las transacciones son 100% seguras.

Cobrar con tarjeta ya no es el sueño de muchos ni la posibilidad de pocos.