Una inteligencia artificial detecta amenazas terroristas
Un coco puede ser para muchos solo una fruta. Para otros, es posible que haga referencia a la mente humana, al ser imaginario con el que se asusta a los niños o al título de una película sobre el Día de los Muertos ambientada en México. Lo cierto es que, dependiendo del contexto en el que se use esta palabra, puede significar mucho más que eso. Este término puede incluso ser una señal de radicalización terrorista. “Coconut [coco, en inglés] en el ámbito yihadista a veces se utiliza para identificar a aquellos musulmanes que siendo tostados por fuera, por dentro son blancos. Es decir que simpatizan con el infiel”, explica José Manuel Gómez, responsable del I+D de Madrid de Expert System.
El análisis de texto le sirve a esta empresa para detectar con inteligencia artificial terminología yihadista, localizar a personas adoctrinadas a través de Internet, descubrir información engañosa y establecer si diferentes cuentas en redes sociales son utilizadas por una misma persona. La tecnología desarrollada por Expert System es utilizada en los proyectos Dante y Trivalent, que están financiados por la Comisión Europea. Universidades, cuerpos policiales y administraciones públicas europeas trabajan en ambas iniciativas con el objetivos de avanzar en la interpretación y comprensión de los comportamientos y los focos relacionados con las amenazas terroristas.
“Los mensajes de odio en los que se descalifica al infiel son los más típicos y los más fáciles de detectar”, afirma Gómez. Precisamente, el uso del término “infiel” puede ser un indicativo de esta terminología radical. En los textos yihadistas, también suelen estar presentes las armas, explosivos y el Corán: “Es muy curioso porque algo que en principio es solamente un símbolo religioso se utiliza para dar legitimidad a lo que están haciendo”.
La inteligencia artificial desarrollada por Expert System detecta, por un lado, la aparición de terminología yihadista en estos textos y, por otro, hace un análisis más profundo para clasificar los textos en las distintas narrativas que los grupos yihadistas utilizan para radicalizar a sus simpatizantes. A partir de estos datos, los cuerpos policiales son capaces de detectar a personas que pueden estar siendo adoctrinadas en el terrorismo.
“A veces emiten mensajes a través de redes sociales o foros con el propósito de evangelizar sobre la guerra contra el infiel”, cuenta Gómez. Otra narrativa es la de «la supremacía islamista entre grupos”: “Entre Al Qaeda y el Estado Islámico [ISIS, en sus siglas en inglés] hay una gran rivalidad en ese sentido”. La clasificación de textos en las diferentes narrativas sirve para advertir a las fuerzas de seguridad de si deberían prestar atención a un texto determinado o “simplemente se está hablando en términos generales del Corán, la religión o un montón de cosas que son islámicas pero no son yihadistas”.
La compañía también ha diseñado un detector de desinformación que es capaz de identificar el uso de «lenguaje engañoso». El sistema localiza, con un 75% de acierto, si un documento es verdadero o falso. Una de los grandes avances de este detector es que puede analizar información de cualquier dominio, independientemente de que el sistema haya sido entrenado previamente para reconocerlo.
Fuente: elpais.com