Regreso al Futuro (o el Duende Verde) es real: el primer Hoverboard volador existe

Hunter Kowald lo ha conseguido. Muchos lo llamaron loco soñador, pero tras años de trabajo, su hoverboard ya está terminada. Y es absolutamente increíble…

Desde que se estrenó la mítica película Regreso al Futuro II, en 1989, varias generaciones de niños y adultos han soñado con poseer un monopatín o tabla de skate capaz de flotar medio metro por encima del suelo.

El joven emprendedor Hunter Kowald ha ido un paso más allá, al diseñar un hoverboard volador que no solo puede flotar un metro sobre encima de suelo: también volar como un dron a 3 o 4 metros de altura… con una persona encima. Como el Duende Verde…

Es mejor que lo veas con tus propios ojos, porque el vídeo te deja con la boca abierta. A esto se le llama entrar a lo grande en mitad de una fiesta…

El Hoverboard de Hunter Kowald es básicamente un dron de poco más de un metro, capaz de transportar a un persona de 75 Kilos encima. Ya habíamos visto naves voladoras así, pero mucho más grandes y voluminosas, funcionando con combustible.

Como muestra el vídeo se controla con un joystick que el piloto lleva en una mano. Básicamente, como en un videojuego…

Hunter Kowald ha conseguido diseñar un hoverboard de reducido tamaño con unos motores sorprendentemente pequeños. Asegura que puede cargar con 226 Kilos como máximo oficial, aunque lo han probado con éxito con 340 Kilos.

También afirma que es muy seguro. Es capaz de aterrizar aunque fallen dos de los seis motores, o uno de los cinco sistemas de impulso.

De momento no conocemos más especificaciones, pero ahora que está terminado y es viable, han iniciado los trámites para comercializarlo.

Y aunque en este vídeo vemos el lado más espectacular del Hoverboard, quedan por pulir aspectos como la seguridad, los permisos de vuelo y circulación… y la autonomía.

Al ser un dron tan ligero con unas baterías pequeñas, que tiene que levantar tanto peso, su autonomía está limitada. En el modelo de prueba se reduce a… unos 275 metros. Pero es un tema muy mejorable, con baterías más grandes o la opción de colocarlas en la espalda del piloto.

Eso sí, el precio no estará al alcance de todo el mundo. Aún no es oficial, pero se habla de que rondará los 20.000 dólares. Nadie dijo que cumplir un sueño sea barato…

Fuente: computerhoy.com