Google y Stanford crean una aldea con 25 bots gestionados por IA que interactúan y viven como seres humanos
La curiosa aldea virtual que han creado los investigadores para seguir avanzando en el campo de la inteligencia artificial y hacerla cada vez más indistinguible del comportamiento del ser humano.
La inteligencia artificial ha avanzado bastante en los últimos meses, no obstante, productos como ChatGPT o Bing AI ya están presentes en muchos de nuestros aparatos tecnológicos como teléfonos móviles.
Sin embargo, hasta ahora esta inteligencia artificial ha estado algo lejos de un comportamiento humano, y los investigadores quieren dar un paso al frente con un experimento que parece que les está funcionando.
Para ello un equipo de investigadores de Stanford junto a Google han creado una aldea virtual repleta de agentes de inteligencia artificial, y lo más curioso de todo, es que parecen llevar una vida como si fueran realmente seres humanos.
No obstante, estos agentes de inteligencia artificial se despiertan todas las mañanas, hacen sus tareas obligadas, y luego también se relacionan con los demás e incluso crean fiestas.
Los investigadores hablaron de cómo estos agentes de inteligencia artificial, cada uno con nombre propio, eran capaces de planificar sus días de forma autónoma, y en ello también se involucró la organización de fiestas como la de San Valentín, o incluso se formaron opiniones sobre hipotéticas elecciones.
Por ejemplo, en uno de los casos, los investigadores pidieron a uno de los agentes de IA que planeara una fiesta de San Valentín, y el resto de los agentes comenzaron a repartir invitaciones de la fiesta de forma autónoma, incluso decoraron el lugar.
En otro experimento los investigadores hablaron sobre las próximas elecciones, y vieron como los agentes de IA fueron formando cada uno sus propias opiniones.
Objetivo: perfeccionar a estos bots con la capacidad de almacenar recuerdos
Cabe aclarar, que esta tecnología está basada en la inteligencia artificial generativa y en el procesamiento de lenguaje natural, la misma tecnología que por ejemplo usa ChatGPT.
De esta forma, se puede ofrecer a los bots conversaciones que reflejan las interacciones humanas.
Ahora se han marcado como objetivo perfeccionar a estos bots con la capacidad de almacenar recuerdos y reflexionar sobre ellos, algo clave para lograr un comportamiento creíble similar al del ser humano.
Esto permitiría a los bots usar experiencias pasadas para informar sobre acciones futuras, recordando ciertos detalles.
Fuente: computerhoy.com