El Departamento de Inmigración y Protección Fronteriza de Australia está buscando desechar la necesidad de pasaportes, e introducir sistemas de reconocimiento facial, iris o huellas dactilares. Las llegadas internacionales podrían ser mucho más rápidas ya que no se tendría que interactuar con ningún oficial. Con esto, se erradicaría la necesidad de tener un pasaporte. Además de hacer la experiencia más eficiente, la oficina piensa que el sistema sería mejor al identificar pasajeros en listas negras.

A pesar de que un número de aeropuertos están utilizando este tipo de tecnologías desde hace algunos años, se requiere aún tener un pasaporte para escanear. Sin embargo, el nuevo sistema, que sería instalado en los próximos tres años, va más allá. Las autoridades planean instalar la tecnología en el aeropuerto de Canberra en julio, antes de hacerlo en un aeropuerto más concurrido, como el de Sydney o Melbourne en noviembre.

Aunque aún no han decidido exactamente qué tipo de sistema van a utilizar y están haciendo una convocatoria para encontrar soluciones innovadoras. John Coyne, cabeza de seguridad fronteriza en el Australian Strategic Policy Institute comenta que el plan es facilitar el proceso de llegada como si se tratara de un viaje doméstico. Sería la primera vez en el mundo que se haría algo así.

Fuente: ideaseinventos.es