Realizan ingeniería genética a la Salmonella para que destruya tumores cerebrales
La salmonella esa bacteria que comúnmente es vinculada a fiebre e intoxicación alimentaria está siendo modificada por científicos para que pueda comerse tumores de cáncer.
Investigadores de la Universidad de Duke dieron el tratamiento a ratas con glioblastoma del cerebro, y vieron aumentos significativos en la esperanza de vida, un 20% de los roedores sobrevivieron un extra 100 días comparados a los animales de control, el equivalente de 10 años en términos humanos.
Las bacterias modificadas se dirigen a los tumores en el cerebro en lugar de buscar el intestino humano, la técnica podría conducir a una técnica muy específica de combatir uno de los peores tipos de cáncer que existe.
“Dado que el glioblastoma es tan agresivo y difícil de tratar, cualquier cambio en la tasa de supervivencia media es muy bueno”, dice Johnathan Lyon uno del equipo. “Y dado que pocos sobreviven un diagnóstico de glioblastoma indefinidamente, una tasa de curación eficaz del 20% es fenomenal y muy alentadora”.
Estos hallazgos son prometedores ya que sólo alrededor del 30% de los pacientes con glioblastoma viven más de dos años después del diagnóstico.
Los investigadores utilizaron una forma genéticamente ajustada y destoxificada de Salmonella typhimurium, modificada para ser deficiente en una enzima crucial llamada purina.
Los tumores de glioblastoma son una fuente abundante de esta enzima, que induce a las bacterias a buscar las células cancerosas para obtener la purina que necesitan.
Y cuando las bacterias llegan a los tumores, dos ajustes genéticos más ponen en acción. Debido a que las células cancerosas se multiplican tan rápidamente, el oxígeno es escaso dentro y alrededor de los tumores. Sabiendo esto, los científicos codificaron su Salmonella para producir dos compuestos llamados Azurin y p53 en presencia de bajos niveles de oxígeno. Estos compuestos instruyen a las células cancerosas para autodestruirse de manera efectiva, por lo que el resultado final es como un misil guiado genéticamente codificado, buscando el tumor.
Los investigadores dicen que la técnica es mucho más precisa que la cirugía, y debido a que las bacterias son desintoxicadas de otra manera, no debe haber efectos secundarios perjudiciales para el paciente.
Por supuesto, tener éxito con un grupo de ratas no es garantía de que el tratamiento se traducirá en el cuerpo humano, pero los investigadores esperan que la técnica se puede desarrollar para tratar a los pacientes de cáncer en el futuro.
El primer paso es aumentar la tasa del 20% de éxito. “Podría ser un caso de necesidad de controlar la progresión del tratamiento y proporcionar más dosis en puntos cruciales en el desarrollo del cáncer”, dice Lyon. “Sin embargo, este fue nuestro primer intento de diseñar una terapia de este tipo, y hay algunos matices para el modelo específico que utilizamos, por lo tanto, más experimentos son necesarios para saber con seguridad”.
Fuente: cerebrodigital.org