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Protege tu piel del frío y evita la resequedad en invierno

La resequedad provoca daños en manos, brazos, piernas y el rostro

Durante los meses de mayor frío, la piel se vuelve más vulnerable a la resequedad, especialmente en las zonas expuestas al viento como las manos, brazos, piernas, y el rostro, particularmente en los labios y párpados.

Esta condición puede estar acompañada de comezón, y en pacientes con dermatitis, el aire frío podría agravar su situación.

El dermatólogo Andrés Campuzano García, del Hospital General Zacatecas “Luz González Cosío”, comparte valiosas recomendaciones para el cuidado de la piel durante la temporada invernal, especialmente para los grupos más vulnerables como los niños menores de cinco años y los adultos mayores de 60.

Hidratación: clave contra la resequedad

Para combatir la resequedad, el médico recomienda aplicar crema hidratante dos veces al día en todo el cuerpo, incluso en días en que no se realice el baño. Esta rutina es fundamental para mantener la piel protegida de los efectos del aire frío.

En cuanto al baño, es común que las personas utilicen agua extremadamente caliente para contrarrestar el frío. Sin embargo, esta práctica puede empeorar la resequedad de la piel, ya que elimina sus aceites naturales.

Cuidados específicos para los Labios y el rostro

En el caso de los labios, es recomendable usar un bálsamo protector para prevenir que se partan o se irriten. Se debe optar por productos sin ingredientes como mentol, colorantes o fragancias, ya que estos pueden causar ardor o agravar la irritación.

Otro problema frecuente en esta temporada es el Rubor Facial, una respuesta normal de los vasos sanguíneos al pasar de un ambiente frío a uno cálido. Sin embargo, si esta coloración se acompaña de comezón o la aparición de pequeños granos, podría tratarse de una condición más seria como la Rosácea, y se debe consultar a un especialista.

La protección solar también es importante en invierno

El dermatólogo recuerda que, aunque no sea temporada de calor, la protección solar sigue siendo esencial. Esto incluye el uso de cremas protectoras (protección química) y barreras físicas como sombreros y sombrillas, además de evitar la exposición prolongada al sol.

Consejos básicos para proteger la piel en invierno

  1. Aplica crema hidratante dos veces al día, especialmente en zonas propensas a la resequedad.
  2. Evita bañarte con agua extremadamente caliente para no agravar el problema.
  3. Protege tus labios con un bálsamo libre de irritantes como mentol o fragancias.
  4. Esté atento a cambios en la piel como comezón o granos, que pueden ser signos de Rosácea u otras enfermedades.
  5. Usa protector solar, incluso en días nublados o fríos.

Con estos cuidados básicos, es posible mantener la piel saludable y libre de molestias durante los meses más fríos del año. Consulta siempre a un dermatólogo ante cualquier problema persistente para garantizar el bienestar de tu piel.

Fuente: oem.com.mx

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