La farmacéutica Gilead ha anunciado conclusiones preliminares de un ensayo en fase 3 con 600 pacientes. Su antiviral aceleró la recuperación de personas con síntomas moderados de la COVID-19 en un tratamiento de cinco días. Anteriores estudios habían indicado que remdesivir es uno de los únicos medicamentos en mostrar alguna promesa, pero por sí solo no es suficiente
Según la compañía, en el estudio de fase 3 con 600 pacientes se evaluó la seguridad y la eficacia del medicamento. Los enfermos con síntomas menos graves, que no precisaban de un respirador y fueron tratados con remdesivir durante cinco días, “tuvieron más probabilidades de lograr una mejora clínica después de 11 días en comparación con los que recibieron solo los cuidados estándar”.
Sin embargo, “aunque los pacientes que recibieron un tratamiento de 10 días con remdesivir mejoraron también, “los resultados no fueron estadísticamente significativos. El medicamento mostró seguridad en ambos grupos”, señalan en Gilead.
Los datos de este ensayo aún no han sido publicados en ninguna una revista científica revisada por pares, pero la empresa indica que planea enviar la información completa para su publicación en las próximas semanas.
Estudio previo
Los resultados de Gilead se dan a conocer unas semanas después de que se publicara un estudio sobre el tratamiento de pacientes de COVID-19 con remdesivir en la revista New England Journal of Medicine. La investigación, liderada por el Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas de EE UU, analizó los datos de más de 1.000 personas en 68 hospitales de todo el mundo. De ellas, a una mitad se le inyectó este fármaco y a la otra, un placebo durante 10 días.
Las conclusiones más destacadas de esta investigación, en la que participaron varios centros españoles, bajo la coordinación del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, apuntaban a que el fármaco acortaba la duración de la enfermedad en cuatro días –de un promedio de 15 días a 11 días–. La mejora se producía sobre todo en los pacientes que tenían falta de oxígeno en sangre pero que no requerían respiración mecánica o extracorpórea.
Los autores concluyeron que “el tratamiento con un medicamento antiviral por sí solo probablemente no era suficiente” para tratar la COVID-19.
En el actual anuncio, el jefe médico de Gilead, Mehrdad Parsey, subraya que con los últimos datos anunciados la firma tiene ahora “tres ensayos clínicos aleatorios y controlados que demuestran que remdesivir mejora los resultados clínicos a través de varias mediciones diferentes”, según recoge el comunicado.
La Administración de medicamentos y Alimentos de EE UU (FDA, por sus siglas en inglés) no ha aprobado el remdesivir como tratamiento para la COVID-19, pero a principios de mayo, emitió una autorización de uso de emergencia para los pacientes más enfermos.
Gilead, señala que “este fármaco está aprobado para tratar la COVID-19 en Japón y se considera un tratamiento en investigación para esta enfermedad en otras partes del mundo”.
Según destaca Parsey, “con los datos adicionales que tenemos hoy, continuaremos buscando oportunidades de investigación para evaluar los resultados y beneficiar a más pacientes con remdesivir. Esto incluye extender el tratamiento en una etapa temprana de la enfermedad, investigaciones de combinación con otras terapias para los pacientes más críticos, estudios pediátricos y el desarrollo de formulaciones alternativas”.
El jefe médico también dice que su empresa continuará “compartiendo los nuevos datos con las autoridades reguladoras mientras trabajamos para ayudar a abordar las necesidades de los pacientes en todo el mundo”.
“No son mejoras dramáticas”
Por otro lado, Stephen Evans, profesor de farmacoepidemiología en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres ha publicado una declaración escrita en el Science Media Centre de Londres en la que señala que las mejoras que anuncia Gilead en su ensayo con remdesivir “no son radicales”. Evans dice además que “los datos muestran que solo hay una pequeña diferencia entre los grupos en esta mejoría.
El científico británico opina que “remdesivir es uno de los únicos medicamentos que muestran alguna promesa, pero los beneficios no son grandes y necesitamos tener datos más transparentes para poder formar un buen juicio”.
Según este experto, “todos estamos esperando buenas noticias sobre una terapia que funcione frente a la COVID-19, pero, por el momento, las pruebas son escasas y las empresas necesitan proporcionar datos adecuados, en lugar de solo comunicados de prensa”.
Fuente: SINC