México da un paso a la edición genética de células T para tratar leucemia y cáncer

La edición genética de las células T tiene el potencial de mejorar la capacidad del sistema inmunológico para combatir enfermedades

El Secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, dijo que México ha dado un paso decisivo en cuanto a la edición genética de células T, que son indispensables para la inmunoterapia avanzada contra enfermedades como la leucemia y el cáncer.

El canciller dijo que se reunirá en Mumbai con especialistas en el tema para iniciar operaciones en el consulado de México destinado a la tecnología e inversión.

Qué es la edición de celulas T

Las células T o linfocitos T, son células del sistema inmunológico que desempeñan un papel importante en la defensa del cuerpo contra patógenos como virus, bacterias y células cancerosas.

Estas células tienen su origen en la médula ósea y se maduran en el timo. Las células T tienen receptores de antígenos en su superficie, lo que les permite reconocer y unirse a moléculas extrañas o “antígenos” presentes en las células infectadas o anormales.

Cuando una célula T se une a un antígeno específico, se activa y comienza a reproducirse y a liberar sustancias químicas que pueden destruir la célula que presenta el antígeno.

La edición genética de las células T tiene el potencial de mejorar la capacidad del sistema inmunológico para combatir enfermedades. La tecnología de edición genética, como CRISPR-Cas9, permite a los investigadores cambiar o eliminar genes específicos en las células T para mejorar su capacidad para reconocer y atacar patógenos o células anormales.

Por ejemplo, la edición genética de las células T puede usarse para crear células T que expresen receptores de antígeno específicos (CAR-T), diseñados para reconocer y atacar células cancerosas.

Los investigadores pueden extraer células T de un paciente y modificarlas genéticamente para expresar receptores de antígeno específicos que se unen a proteínas en la superficie de las células cancerosas.

Estas células T modificadas se multiplican en el laboratorio y se infunden en el paciente, donde pueden atacar y destruir las células cancerosas.

Además, la edición genética de las células T también puede usarse para mejorar la respuesta inmune contra enfermedades infecciosas, como el VIH o la hepatitis B y C.

Los investigadores pueden modificar las células T para que expresen receptores de antígeno específicos para el virus y luego infundir estas células T modificadas en el paciente, donde pueden reconocer y destruir las células infectadas con el virus.

Fuente: debate.com.mx