En personas con epilepsia fotosensible, se sabe que las luces intermitentes pueden desencadenar convulsiones, con resultados que pueden ser bastante impresionantes. Pero las convulsiones pueden ser activadas por ciertas imágenes fijas también, como revela una revisión de la literatura científica publicada este lunes en ‘Current Biology’, cuyos autores dicen haber descubierto por qué sucede.
La clave, proponen, es un patrón repetitivo particular de actividad neuronal en el cerebro conocido como oscilaciones gamma que se produce cuando las personas ven ciertas imágenes, como patrones de barras en blanco y negro, y no otras. De hecho, tal y como dicen los investigadores, es posible que esos tipos de imágenes sean responsables de otros problemas, como los dolores de cabeza de tipo migraña, particularmente en personas que son generalmente sensibles a la luz.
“Nuestros resultados implican que, en el diseño de edificios, puede ser importante evitar los tipos de patrones visuales que pueden activar este circuito y causar incomodidad, migrañas o convulsiones”, dice Dora Hermes, del Centro Médico Universitario Utrecht, en Países Bajos. “Incluso las personas perfectamente sanas pueden sentir un malestar modesto por las imágenes que son más propensas a desencadenar convulsiones en la epilepsia fotosensible”, añade.
Las oscilaciones gamma en el cerebro se pueden determinar en un electroencefalograma (EEG), una prueba que mide la actividad eléctrica en el cerebro usando pequeños electrodos unidos al cuero cabelludo. Los científicos los han estudiado desde la década de 1980, pero aún no hay consenso sobre la importancia de esos patrones de pensamiento, percepción o procesamiento neural.
“Algunos científicos sostienen que estas oscilaciones son enormemente importantes y esenciales para la concienciación, la atención y la comunicación neuronal, mientras que otros dicen que son más probablemente un subproducto del procesamiento neuronal normal, una señal potencialmente útil para el diagnóstico, pero no una que haga funcionar la maquinaria neuronal”, dice Hermes.
Reducir el contraste o el ancho de las líneas
Un argumento en contra de la idea de que las oscilaciones gamma son importantes para el procesamiento neural es que se producen en el cerebro cuando se ven algunas imágenes y no otras. Los patrones de rejilla producen fuertes oscilaciones gamma mientras que las nubes hinchadas o muchas escenas naturales típicamente no lo hacen por razones que los científicos no comprenden completamente.
En el nuevo informe, Hermes y sus compañeros, entre ellos Jonathan Winawer, de la Universidad de Nueva York, Estados Unidos, y Dorothée Kasteleijn-Nolst Trenité, de UMC Utrecht, concluyen que estas imágenes que provocan oscilación gamma también son más propensas a desencadenar ataques. Hay maneras simples de ajustar una imagen para poder amortiguar ese patrón de actividad cerebral, señalan, y esos ajustes incluyen reducir el contraste, ajustar el ancho de las barras, o cambiar la imagen de un diseño de rejilla a algo más como una tela escocesa.
“Lo que distinguimos en esta propuesta es que el vínculo entre las imágenes que desencadenan la epilepsia fotosensible y la actividad cerebral normal es particular a las oscilaciones gamma y no a otras formas o respuestas neuronales”, dice Winawer. Los hallazgos sugieren que los estudios existentes sobre las oscilaciones gamma podrían ofrecer pistas importantes para entender la epilepsia fotosensible.
Fuente: antena3.com