Salud

Con ayuda del LSD, descubren cómo da sentido al mundo nuestro cerebro

Todos tenemos experiencias o cosas particulares (como una canción favorita, por ejemplo) que significan mucho más para nosotros que otras experiencias y cosas.

Ahora, un equipo de investigadores ha estudiado esos cambios en el sentido que damos a los objetos o las experiencias, en personas que habían tomado una droga psicodélica conocida como LSD. En concreto, los científicos han rastreado esa emoción de «significado» a través de neuroquímicos  y receptores cerebrales particulares.

Sus hallazgos, publicados en la revista Current Biology, se suman a nuestra comprensión fundamental de la experiencia humana. También apuntan a nuevos objetivos terapéuticos potenciales para el tratamiento de enfermedades psiquiátricas o fobias, relacionadas con anomalías en la atribución de relevancia a determinadas experiencias sensoriales o señales.

«Nuestros resultados aumentan nuestra comprensión de cómo la atribución personal  de relevancia está habilitada en el cerebro», explica al respecto la directora de la investigación, Katrin Preller, del Hospital Universitario de Psiquiatría de Zürich. «Ahora sabemos qué receptores, neurotransmisores y regiones del cerebro están involucrados en nuestra percepción de nuestro entorno como algo significativo y relevante».

¿Por qué usar una droga?

En la investigación se utilizó el LSD porque estudios previos habían demostrado que esta droga altera la atribución de significado y de relevancia personal al contexto. El LSD también cambia la manera en que la gente se percibe a sí misma, ya que la distinción entre el yo y el mundo fuera del yo se borra.

Esto lo había demostrado ya, por ejemplo, un estudio realizado en 2016 con imágenes del cerebro captadas con la tecnología de resonancia magnética. Estas imágenes constataron que las personas que toman LSD sienten que se hacen uno con el mundo. Sin embargo, quedaba por aclarar exactamente qué partes del cerebro y qué neuroquímicos son responsables de estos efectos.

Para explorar la influencia del LSD en la forma en que las personas atribuyen significado a las cosas de su entorno, Preller y su equipo pidieron a una serie de participantes que tomaran un placebo, LSD o LSD más un medicamento llamado ketanserin, que bloquea la capacidad del LSD para actuar sobre los receptores 5-HT2ARs de serotonina en el cerebro (receptores que serían los responsables de buena parte de los efectos de esta droga sobre la percepción).

Luego, se pidió a todos los voluntarios que clasificaran el significado que le daban a una serie de canciones. Algunas de ellas habían sido señaladas por los propios  participantes como particularmente significativas, mientras otras eran neutras o carecían de un sentido especial para ellos.

Los investigadores descubrieron que piezas musicales que antes carecían de sentido para los voluntarios adquirieron un significado especial cuando estos estaban bajo los efectos del LSD.

Pero esa influencia disminuyó cuando los participantes recibieron el segundo fármaco (ketanserin) para contrarrestar los efectos del LSD en los receptores de serotonina del cerebro. Además, los científicos realizaron análisis de imágenes cerebrales que vincularon esas atribuciones cambiantes del significado a determinadas áreas cerebrales.

«Al combinar imágenes cerebrales funcionales y evaluaciones detalladas del comportamiento utilizando un paradigma experimental específico de estudio de la relevancia personal o el significado de las piezas musicales, pudimos dilucidar los correlatos neurobiológicos del procesamiento de la relevancia personal en el cerebro», explica Preller. 

Resultados obtenidos

«Encontramos que la atribución de significado personal y su modulación por parte del LSD está mediada por los receptores 5-HT2A y las estructuras corticales de la línea media que también están implicadas, de manera crucial, en  la experiencia del sentido del yo», aclara.

Los investigadores planean ahora explorar si observan los mismos efectos en respuesta a estímulos visuales o táctiles. También esperan analizar la relevancia de sus hallazgos en atribuciones disfuncionales de significado, en individuos con trastornos psiquiátricos.

Esto es porque la estimulación excesiva de los receptores 5-HT2A parece subyacer a trastornos que hacen atribuir sentido y relevancia personal a percepciones y experiencias que de otra manera no lo tendrían.

«Por tanto, es importante considerar este subtipo de receptor como objetivo potencial para el tratamiento de enfermedades psiquiátricas caracterizadas por alteraciones en la atribución de relevancia personal», sigue diciendo Preller.

Una investigación previa había sugerido asimismo que una sustancia alucinógena presente en hongos llamada psilocibina tendría propiedades terapéuticas y podría usarse como tratamiento de los síntomas de la depresión, ya que ayudaría a los pacientes a cambiar patrones pesimistas muy rígidos de pensamiento, merced a la apertura de mente que promueve.

Fuente: tendencias21.net