Científicos rusos logran método para curar piel y órganos internos sin dejar cicatrices
Las intervenciones quirúrgicas complejas casi siempre dan lugar a marcas ásperas, parecidas a un tumor, de tejido conectivo
La primera tecnología quirúrgica del mundo para curar las incisiones de los órganos internos y externos sin que se formen cicatrices fue desarrollada por investigadores rusos. Según ellos, el método láser propuesto es muy eficaz, preciso y barato.
Las intervenciones quirúrgicas complejas casi siempre dan lugar a cicatrices ásperas, parecidas a un tumor, de tejido conectivo. Mientras que las cicatrices en la piel suelen tener solo un efecto negativo estético, las cicatrices en los órganos internos pueden perjudicar significativamente su función, afirman los expertos.
Los científicos de la Universidad Nacional de Investigación en Tecnología Electrónica (MIET) y la Universidad Séchenov desarrollaron un método que, según ellos, garantiza la restauración de las incisiones del tejido corporal sin la formación de cicatrices. La nueva tecnología consiste en utilizar un compuesto biorgánico especial como soldadura, que se aplica a la zona de la herida y luego se fusionan sus bordes con láser.
«Pudimos demostrar la ventaja de la tecnología de reparación de heridas con láser de tejidos blandos sobre los métodos quirúrgicos tradicionales. La tecnología permite obtener rápidamente una sutura hermética de dimensiones mínimas, que en el futuro no dejará una cicatriz áspera y visible», explicó Alexandr Guerasimenko, profesor asociado del Instituto de Sistemas Biomédicos de la MIET.
Según el científico, este efecto se garantiza por una composición de soldadura única basada en la albúmina, proteína de transporte de la sangre, así como el absorbente óptico verde de indocianina y los nanotubos de carbono de pared simple.
El propio dispositivo láser está equipado con un sistema inteligente de retroalimentación de la temperatura para controlar la intensidad de la radiación láser. Mediante un software, el calentamiento por láser del biotejido se realiza con una precisión de 0,5° Celsius.
«Los componentes de la soldadura se han seleccionado para absorber la luz del láser lo máximo posible, concentrándola en la zona de la herida. La radiación transforma la soldadura líquida en un biocompuesto sólido y poroso que une firmemente los bordes de la incisión. En el proceso de cicatrización posterior, el composite favorece el brote de tejido en su estructura y luego se disuelve y se elimina del cuerpo», explicó Guerasimenko.
Inmediatamente después de la cirugía, las suturas láser con soldadura biorgánica son de tres a cuatro veces menos anchas que las suturas cosidas con hilo. Diez días después de la cirugía, el tejido en la zona del nuevo tipo de sutura es prácticamente indistinguible de la piel original, subrayaron los científicos.
Los ensayos del nuevo método demostraron no solo una curación eficaz de las incisiones cutáneas lineales, sino también una reducción concomitante de la inflamación, la ausencia de microinterrupción de la circulación sanguínea y la aceleración del crecimiento del tejido conectivo en el lugar de la herida, señalaron los creadores. Los resultados se publican en la revista Bioegineering.
Fuente: elciudadano.com