Todo el mundo ha oído hablar de combatir el fuego con fuego.
Ahora esa táctica está llegando al tratamiento del cáncer de mama.
Los investigadores creen que han descubierto una mejor manera de combatir el cáncer de mama alimentado por la hormona femenina estrógeno: mediante el empleo de mecanismos utilizados por la hormona masculina andrógeno.
Un fármaco experimental llamado enobosarm estimula el receptor de andrógenos en las células cancerosas, que funciona como un supresor de tumores, informaron investigadores en una edición reciente de la revista The Lancet Oncology .
El fármaco hizo que los cánceres de mama avanzados se ralentizaran o se detuvieran en el 32 por ciento de las pacientes que tomaban una dosis más baja y en el 29 por ciento de las pacientes que tomaban una dosis más alta después de unos seis meses, según muestran los resultados de un ensayo clínico de fase 2.
“Nuestros hallazgos son muy prometedores. Demuestran que estimular la vía del receptor de andrógenos con enobosarm puede ser beneficioso”, señaló la coautora principal, la Dra. Beth Overmoyer, directora del Programa de Cáncer de Mama Inflamatorio del Instituto Oncológico Dana-Farber, en Boston.
Los cánceres de mama con receptores de estrógeno positivos (ER+) representan hasta un 80 por ciento de todos los casos de cáncer de mama, señalaron los investigadores en las notas de respaldo. Hasta ahora, las terapias hormonales se han centrado en suprimir la actividad de los estrógenos en estos casos.
Estos resultados representan el primer avance en el tratamiento del cáncer de mama ER+ en décadas, señalaron los investigadores.
“La efectividad del enobosarm radica en su capacidad para activar el (receptor de andrógenos) y desencadenar un mecanismo de defensa natural en el tejido mamario, ralentizando así el crecimiento del cáncer de mama ER+, que depende de la hormona estrógeno para crecer y propagarse”, señaló el coautor principal Wayne Tilley, director de los Laboratorios de Investigación del Cáncer Dame Roma Mitchell de la Universidad de Adelaida, en Australia.
Para el estudio de fase 2, que se centra en la seguridad y la eficacia potencial, se asignó al azar a 136 mujeres con cáncer de mama positivo para estrógenos a tomar 9 miligramos o 18 miligramos de enobosarm al día. El medicamento se toma en forma de pastilla.
Los resultados mostraron que el fármaco tenía una actividad antitumoral significativa y era bien tolerado por los pacientes, dijeron los investigadores.
Los resultados muestran que la supervivencia promedio libre de progresión fue de 5,6 meses en el grupo de dosis más baja y de 4,2 meses en el grupo de dosis más alta.
“Esta es la primera vez que se ha demostrado que un método de tratamiento hormonal sin receptores de estrógeno es clínicamente ventajoso en el cáncer de mama ER+”, señaló Overmoyer en un comunicado de prensa de la universidad.
Alrededor del 8 % de los pacientes que recibieron dosis bajas y el 16 % de los pacientes que recibieron dosis altas tuvieron efectos secundarios adversos significativos, con mayor frecuencia signos de daño hepático, niveles elevados de calcio y fatiga.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ha otorgado a Enobosarm la designación de vía rápida. El fármaco deberá someterse a un ensayo clínico confirmatorio de fase 3 antes de su aprobación.
Más información
La Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society) ofrece más información sobre el cáncer de mama.
Fuente: infobae.com