Aíslan gen humano que impide contagio con virus de la gripe aviar

Investigadores británicos han descubierto un gen humano que impide que la mayoría de los virus de la gripe aviar infecten a las personas.

La gripe aviar se propaga principalmente entre aves silvestres como patos y gaviotas, y también puede infectar a aves de granja y aves de corral domésticas como pollos, pavos y codornices.

Aunque los virus afectan sobre todo a las aves, pueden contagiarse a sus depredadores y, en raras ocasiones, a los seres humanos que suelen estar en estrecho contacto con aves infectadas.

Un equipo de científicos del Centro MRC-Universidad de Glasgow para la Investigación de Virus estudió cientos de genes expresados normalmente por células humanas, comparando el comportamiento de los genes durante la infección con virus estacionales humanos o virus de la gripe aviar.

Se centraron en un gen llamado BTN3A3, que se expresa tanto en las vías respiratorias superiores como en las inferiores. Apodado B-force por los investigadores, el gen bloquea la replicación de la mayoría de las cepas de la gripe aviar en células humanas.

Sin embargo, la actividad antivírica del gen no consiguió proteger contra los virus de la gripe humana estacional.

Este gen forma parte de un aparato defensivo más amplio del arsenal inmunitario humano contra los virus aviares.

Según los investigadores, todas las pandemias de gripe humana, incluida la de 1918-19, fueron causadas por virus de la gripe resistentes al BTN3A3, por lo que este gen parece ser un factor clave para determinar si una cepa de gripe aviar tiene potencial pandémico humano.

Sin duda, los virus mutan constantemente, lo que no significa que los virus de la gripe aviar no puedan evolucionar para escapar a la actividad del BTN3A3.

A principios de este año, una nueva cepa H5N1 de gripe aviar que se transmite fácilmente entre aves silvestres se extendió explosivamente por nuevos rincones del planeta, infectando y matando a diversas especies de mamíferos y haciendo temer una pandemia humana. Hasta ahora, sólo se han notificado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) un puñado de casos en humanos.

Alrededor de 50 por ciento de las cepas de H5N1 que circulan por el mundo hasta 2023 son resistentes al BTN3A3, afirma el profesor Massimo Palmarini, autor correspondiente del estudio publicado en la revista científica Nature.

“Este es el tipo de cosas a las que deberíamos prestar especial atención como un nivel de riesgo elevado”, añadió Sam Wilson, coautor principal del estudio.

Fuente: Reuters