María Teresa Gutiérrez Vázquez es reconocida como la primera geógrafa que demostró mediante mapas la posibilidad de representar el desarrollo y la distribución de la población en el país
Nacida en 1927 en la Ciudad de México, María Teresa Gutiérrez Vázquez fue una visionaria cuya pasión por la Geografía transformó la manera en que entendemos la relación entre el ser humano y su entorno. Con un perfil académico que la distinguió como una de las principales figuras del pensamiento geográfico mexicano, dejó una huella imborrable en la ciencia y la educación.
Su trabajo fue un puente entre la geografía tradicional y las nuevas formas de analizar el espacio y la población. En 1972, fue reconocida como investigadora titular “C” de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), un nombramiento que marcó un hito en su carrera. Fue pionera al proponer una revolución en los estudios demográficos, al integrar factores humanos y físicos dentro del concepto de geografía poblacional.
En sus investigaciones de hace más de 50 años, Gutiérrez Vázquez ya veía lo que muchos aún no alcanzaban a vislumbrar: la Ciudad de México se expandía sin control, dejando en el horizonte problemas que hoy nos resultan familiares, como la sobrepoblación, la falta de infraestructura adecuada y los desajustes ecológicos, de acuerdo con información de la Gaceta UNAM.
Primeros pasos en la Geografía
Inició su formación académica en la Escuela Nacional Preparatoria y continuó sus estudios en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, donde obtuvo una maestría cum laude en Geografía en 1959 y un doctorado en 1965. Su tesis de este grado se centró en la geografía física del estado de Jalisco, mientras que la de doctorado abordó aspectos geodemográficos, sentando las bases de su especialización en el análisis de la población.
En 1944, comenzó su carrera docente como ayudante de Pedro Carrasco Garrorena en la clase de meteorología. Un año después, con la fundación del Instituto de Geografía de la UNAM, inició estudios sobre la geografía de la población, un área que más tarde se convertiría en su principal campo de especialización.
Su interés por la geografía urbana y poblacional la llevó a especializarse con ayuda de una beca en el Instituto de Geografía de la Sorbona de París, donde adquirió herramienta que posteriormente aplicaría en México al impartir seminarios y fundar materias como geografía urbana en la FFL y en la Facultad de Arquitectura de la UNAM.
Innovaciones en la geografía poblacional y urbana
En la década de 1960 revolucionó los estudios demográficos al demostrar que los mapas podían ser una herramienta clave para analizar el desarrollo y la distribución de la población. De acuerdo con Gaceta UNAM, fue la primera en advertir que la Ciudad de México crecía de manera desordenada, anticipando problemas urbanos que hoy son evidentes, como la falta de planeación y el impacto en la calidad de vida de sus habitantes.
Entre sus contribuciones más destacadas se encuentran el Atlas de migración interna de México (1988) y el Nuevo Atlas de migración interna de México (1990), obras fundamentales que documentaron los movimientos migratorios en el país, identificando las regiones expulsoras y receptoras de población. Además, participó en la elaboración de los Atlas Nacionales de México publicados por el Instituto de Geografía en 1990 y 2007, consolidando su legado cartográfico.
El trabajo de María Teresa Gutiérrez fue ampliamente reconocido tanto en México como en el extranjero. Desde 1972, fue nombrada investigadora titular “C” en el Instituto de Geografía de la UNAM, donde también ocupó el cargo de directora en dos períodos (1971-1977 y 1983-1989). En 1996, fue designada decana e investigadora emérita del Instituto, un reconocimiento a sus 46 años de trayectoria académica.
Entre los numerosos premios y distinciones que recibió, destacan la Medalla al Mérito “Benito Juárez” otorgada por la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística en 1992, y el reconocimiento de la Third World Organization for Women in Science (TWOWS) en 1994. Ese mismo año, fue nombrada investigadora emérita del Sistema Nacional de Investigadores del Conacyt.
En el ámbito internacional, su impacto fue igualmente significativo. Fue la primera geógrafa latinoamericana en ser nombrada vicepresidenta de la Unión Geográfica Internacional, cargo que ocupó durante dos períodos consecutivos (1984-1992). Este nombramiento impulsó la geografía en la región y le valió el Laureat d’Honneur de la misma institución.
Además, fue miembro honorario de la Royal Geographical Society de Londres desde 1980 y de la Société de Géographie de París desde 1983.
Legado académico y docente
La influencia de María Teresa Gutiérrez trascendió las fronteras de México. Impartió clases en prestigiosas instituciones internacionales como la Universidad de Liverpool, la Universidad de Tennessee, la Universidad de Tsukuba, la Universidad Complutense de Madrid, el University College de Londres, la Universidad Libre de Bruselas y la Academia de Ciencias de Polonia. En la UNAM, promovió e impartió cátedras en diversas áreas de la geografía, incluyendo geografía urbana, geografía humana, geografía económica y geografía demográfica.
El 6 de septiembre de 2017, María Teresa Gutiérrez de MacGregor falleció en la Ciudad de México. Su compromiso con la enseñanza y la investigación dejó una huella imborrable en generaciones de estudiantes y académicos, consolidándola como una figura clave en el desarrollo de la geografía en México y el mundo.
Fuente: infobae.com