LinkedIn revela una brecha de género en los roles directivos femeninos
El universo de los roles ejecutivos siempre estuvo teñido de una cuestión de género, que puso el grito de muchas mujeres por el aire ante la inequidad no sólo de cantidad personas que ocupan estas posiciones dependiendo del género, sino también muchas veces, en los salarios que perciben estas personas por los mismos roles.
En esta ocasión fue la firma LinkedIn, especializada en empleos y el mundo laboral, la que manifestó a través de un informe, que todavía en 2022 existe una brecha entre los roles directivos de las empresas, favoreciendo a los hombres por encima de las mujeres. Es esta inequidad en la cantidad de puestos que se destinan a los distintos sexos uno de los pilares de la lucha que emprendieron gran parte de las mujeres del mundo desde hace más de una década, buscando revindicar sus derechos.
Es que según el informe que publicó la firma, el porcentaje de mujeres que ocupan roles jerárquicos creció entre 2016 momento en el que estaba en un 33,3% del total, a un 36,9% en 2022. Pero este aumento de apenas 3,6% en la cantidad de mujeres que ocupan roles jerárquicos no representa un incremento significativo, pero además si se considera que seguramente la cantidad de empleos de este tipo crecieron en el mercado, este aumento quizás signifique una brecha todavía más grande.
Por otra parte, se considera que si bien la brecha en los puestos laborales convencionales finalmente está comenzando a ceder y empieza a equipararse, los salarios siguen siendo menos competitivos para los puestos “típicos femeninos”, sumando otra brecha más al problema. Pero la cuestión de fondo sigue vigente, y es el problema de la falta de presencia femenina en las posiciones de liderazgo, algo que según los colectivos de mujeres, atenta contra las prácticas respetuosas hacia las mujeres en los ámbitos laborales.
Cuestión de liderazgo
Una de las defensas que argumentan algunas empresas, es que los hombres que contratan en esos puestos están ahí tanto por su extenso currículo de experiencias y por tener una cuota extra de “liderazgo”. Hecho que es refutado por los colectivos feministas señalando que en realidad no hay nada que haga más “líder” a un hombre de una mujer, es más, señalan que el liderazgo femenino suele ser más calmo, preciso y sobre todo prolijo, pero sobre todas las cosas más respetuoso de los derechos de los demás.
Además, vivimos en una era en la que es cada vez más fácil capacitarse mediante un curso online para aprender liderazgo, por lo que cada vez más mujeres pueden capacitarse y tener las herramientas para poder aspirar a un puesto de estas características. Lo mejor de todo es que este tipo de capacitaciones se pueden realizar de forma virtual, en el momento que se guste y sin importar el lugar.
Quizás el conocer estas cifras comience a generar una segunda oleada de conciencia que permita de una vez por todas llegar a un equilibrio completo en términos de la cantidad de puestos que ocupan uno u otro género. Sin distinciones de edad, sexo, y sobre todo sin generar brechas de salarios que no tienen más justificación que una barrera sexista.