Las grandes metrópolis pierden hegemonía científica

Las grandes metrópolis mundiales, como Nueva York, Londres o Tokio, han perdido su preponderancia en la producción y circulación de artículos científicos, según un estudio que publica la revista Scientometrics, del que se informa en un comunicado.

Desde principios de los años 2000, las políticas de educación superior de numerosos países han favorecido una concentración de los medios financieros y humanos a favor de algunos grandes polos universitarios. Por otro lado, el crecimiento exponencial de la población estudiantil a escala mundial ha engendrado una descentralización espacial de los centros de conocimiento.

Diferentes investigaciones han demostrado que este fenómeno de descentralización afecta no sólo a la producción de artículos científicos, sino también a la visibilidad y a su calidad, medidas por el número de citas, es decir, por el número de veces que un artículo científico es tomado como referencia por otros artículos científicos.

Con la finalidad de evaluar la visibilidad de las publicaciones mundiales, Marion Maisonobe y los demás miembros de este equipo investigador han identificado la geolocalización de las publicaciones científicas aparecidas entre 1999 y el año 2011, reseñadas en la Web of Science Core Collection (WoS), que refiere casi un millón y medio de publicaciones científicas por año.

Esta web abarca artículos sobre ciencias experimentales y del universo, así como de medicina, ingeniería, ciencias humanas y sociales. Asimismo, establece vínculos entre citaciones de los diferentes artículos.

Menos hegemonía

Los resultados de esta investigación ponen de manifiesto que las ciudades cuyas publicaciones científicas son históricamente las más citadas, como Nueva York, Londres o Tokio, tienden a perder su hegemonía. La parte de las primeras 10 ciudades mundiales en el número de citas recibidas ha pasado de ser el 23% en el año 2000, a ser el 17,3% en 2010.

Los investigadores estimaron asimismo la evolución de la influencia científica de las ciudades y países del mundo, tomando como indicador la relación entre la parte de citaciones recibidas y la totalidad de artículos publicados.

En este análisis, las ciudades de los países emergentes ganan en impactos, en detrimento de las grandes metrópolis tradicionalmente líderes en la generación de conocimiento científico.

Este fenómeno es especialmente relevante para las ciudades de países de Asia como China, India y Singapur, que registran los mayores progresos en el conjunto de todas las disciplinas científicas.

También es válido para los países que sufren un déficit de visibilidad: Irán, por ejemplo, gana 0,5 puntos en impactos relativos a ciencias del universo, y un 0,8 en matemáticas entre el año 2000 y 2010. Sudáfrica, a su vez, progresa 0,3 puntos en medicina, destaca el estudio.

Los investigadores han demostrado que esta recomposición en la geografía del uso de citas científicas se aprecia incluso en el interior de algunos países. Ponen como ejemplo el caso de Estados Unidos, donde la progresión de impactos en Chicago y Los Ángeles se produce a costa del detrimento de la ciudad de Nueva York.

Dimensión global

Esta evolución se aprecia a nivel global en todas las disciplinas científicas. En el caso de las ciencias humanas y sociales, persiste una asimetría a favor de los países anglófonos, cuyas publicaciones siguen siendo las más citadas, si bien esta tendencia tiende a ser reabsorbida.

Los resultados de esta investigación derrumban el postulado según el cual las grandes metrópolis mundiales serían, por naturaleza, un terreno favorable a la creación de artículos científicos de calidad y las únicas con capacidad para atraer los recursos humanos y financieros.

La descentralización de la investigación científica a escala mundial no ha agravado por lo demás la distancia entre la calidad (medida por el número de citaciones referidas) entre las metrópolis tradicionalmente líderes en conocimiento científico y las otras ciudades.

Más bien al contrario, lo que está ocurriendo es que la emergencia de nuevos polos universitarios está aumentando la producción y la calidad de la investigación científica en todo el mundo, concluyen los investigadores.

Fuente: tendencias21.net