La investigación realizada a bordo del barco de Greenpeace el pasado mes de mayo, utilizó tecnología de punta

Un total de 366 estructuras de ecosistemas arrecifales mesofóticos (EAM), que son hogar de especies de peces de interés comercial, fueron hallados entre las profundidades de los 50 y 80 metros, en la zona de influencia cercana al parque nacional Sistema Arrecifal Veracruzano (PNSAV), durante la expedición realizada por Greenpeace e investigadores –expertos en sistemas arrecifales coralinos-, a bordo del barco Arctic Sunrise. Al no existir reportes, ni estudios previos, la organización demanda mayor protección a estos ecosistemas, en donde encontraron 155 especies potenciales.

“No existen estudios en el Golfo de México (en aguas mexicanas) similares al presentado aquí, por lo que éste representa una línea base para posteriores estudios y dar seguimiento del posible deterioro de estos ecosistemas ante amenazas locales, como obras de infraestructura y globales como el cambio climático, así mismo, para hacer estudios comparativos con regiones mejor estudiadas, como Flower Gardens Banks, al norte del Golfo de México. Esta investigación demuestra que los ecosistemas arrecifales mesofóticos de Veracruz presentan comunidades ecológicas de una riqueza biológica muy relevante y singular” mencionó en conferencia, Javier Bello, especialista en Análisis espacial para la toma de decisiones en la zona costera.

Este jueves, campañistas de Greenpeace México y los expertos del Colectivo Interdisciplinario de Ciencia Aplicada y Derecho Ambiental (CICADA) que participaron en la expedición científica, presentaron los resultados de su estudio “Investigación sobre el estado actual y las amenazas de los ecosistemas arrecifales mesofóticos de la costa norte y central del estado de Veracruz, a bordo del barco de Greenpeace, Arctic Sunrise”.

La investigación realizada a bordo del barco de Greenpeace el pasado mes de mayo, utilizó tecnología de punta nunca usada antes en esa zona y a esas profundidades: un sonar de barrido lateral, un vehículo operado de manera remota (ROV, por sus siglas en inglés) y un sumergible tripulado por dos personas (Nemo 2). Gracias a ello, se obtuvieron fotografías y videos del fondo marino en el centro y norte del estado de Veracruz, que muestran la gran biodiversidad en esa zona.

Debido a la profundidad, se estudiaron por primera vez ecosistemas arrecifales mesofóticos que se caracterizan por la presencia de corales, algas, y organismos que se pueden encontrar en el fondo con poca penetración de luz.

Informaron en la zona norte de Veracruz, el total de los escaneos cubrieron una superficie de 10 044 221.6 m2, en las que se observaron al menos 69 estructuras que pueden ser estructuras arrecifales de medianas a grandes, ya que tienen cientos de metros de ancho y largo.

Además, se descubrió que los ecosistemas arrecifales Tamiahua-Marsellesa (Corazones), en la zona norte, tienen arrecifes profundos que no han sido reportados previamente, y se encuentran fuera del área de protección de flora y fauna Sistema Arrecifal Lobos Tuxpan (APFF SALT).

Se encontraron 115 especies potenciales, sin embargo, por el tiempo dedicado al muestreo, se podría considerar que la riqueza presentada en estos ecosistemas está subestimada, es decir, hay más especies de las observadas.

El equipo científico señaló que se requiere un mayor esfuerzo de muestreo para determinar las dimensiones reales de estas estructuras a una mejor resolución, utilizando equipos como ecosondas de haz múltiple y perfiladores sísmicos.

El reporte indica que en los sitios muestreados se registraron comunidades ecológicas típicas de zonas mesofóticas, compuestas por octocorales, mejor conocidos como corales blandos, corales negros, esponjas e hidrozoarios.

“Estas son muy distintas de las comunidades someras dentro del PNSAV, lo que resalta su valor ecológico y la necesidad de mayor estudio y promover su conservación. Se requiere hacer colecta biológica para una identificación a mejor nivel taxonómico de los organismos bentónicos. Los análisis estadísticos muestran que la diversidad observada durante este estudio es menor a la diversidad potencial, pues si se aumenta el tamaño de muestra se espera que aumente el número de taxones registrados”.

Además, se registraron especies de peces de importancia comercial a todas las profundidades estudiadas,entre los que resaltan Lachnolaimus maximus, Lutjanus analis, Lutjanus griseus, Mycteroperca bonaci, Mycteroperca phenax, Ocyurus chrysurus y Sphyraena barracuda.

Se identificó la presencia común del pez león Pterois miles/volitans, una especie exótica invasora que se registra por primera vez a estas profundidades en Veracruz. Se registraron especies de peces previamente identificados en zonas someras del PNSAV, lo que evidencia una conectividad entre estos ecosistemas, cercanos espacialmente. Algunos de los que destacan son Anisotremus virginicus, Chaetodon sedentarius y Haemulon plumierii.

También, se registraron especies bentónicas comunes a profundidades similares tanto en la zona centro como en la zona norte y algunas que incluso han sido reportadas en otros sitios del Golfo de México como en el Flower Garden Banks, lo que sugiere conectividad a escala de esta gran cuenca.

Se identificó la presencia de artes de pesca fantasma, tales como cuerdas, cordeles, grampines y redes, lo que evidencia que estas zonas están bien identificadas por el sector pesquero.

“La aplicación de este tipo de herramientas y tecnologías en sitios donde el acceso humano es complicado y riesgoso, nos permite encontrar áreas de oportunidad para el manejo de nuestra biodiversidad arrecifal en el Golfo de México. Estos sitios son ampliamente aprovechados por la comunidad pesquera y su conocimiento es imprescindible para buscar estrategias y herramientas para su manejo. Estas investigaciones deben replicarse en otras zonas profundas de nuestros mares, con la intención de considerarlos en los futuros ordenamientos marinos y en los planes nacionales de desarrollo”, dijo Jacobo Santander Monsalvo, investigador del CICADA.

​​Al respecto, Viridiana Lázaro, coordinadora de la investigación a bordo del Arctic Sunrise destacó que esta investigación aporta hallazgos inéditos que agregan elementos que se deben considerar a la hora de evaluar los análisis de impacto ambiental de megaproyectos, como el gasoducto marino Extensión Sureste en su etapa I y II, también llamado “Puerta al Sureste”, a cargo de TC Energy.

“La investigación presenta pruebas contundentes que nos permiten saber que este gasoducto marino que se pretende construir en el Golfo de México pondrá en riesgo a los arrecifes veracruzanos, los beneficios ambientales que generan y la calidad de vida de las personas que habitan en estas zonas. Por ello exigimos que se detenga su construcción”, dijo Viridiana Lázaro.

Por ello, Greenpeace envió a las autoridades correspondientes este reporte con el fin de aportar datos científicos que fundamentan sus exigencias. A la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), demandan considerar el principio de precaución y proteger formalmente a los ecosistemas arrecifales mesofóticos del estado de Veracruz de Ignacio de la Llave que no cuentan con alguna categoría de protección y/o programas de manejo.

Resaltan que las autoridades federales deben enfocar sus esfuerzos en realizar investigaciones en las zonas contiguas a las áreas naturales protegidas área de protección de flora y fauna Sistema Arrecifal Lobos Tuxpan (APFF SALT) y el parque nacional Sistema Arrecifal Veracruzano (PNSAV).

“Hacemos un llamado a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) a cancelar el proyecto del gasoducto Puerta al Sureste».

Fuente: milenio.com