Es nativa de México. “Según algunos trabajos genéticos, parece que el origen de esta planta es en Guerrero”, sin embargo, se “distribuye desde el centro y sur de México, hasta Centroamérica y actualmente en todo el mundo”.

Iván de la Cruz Chacón, investigador del Instituto de Ciencias Biológicas de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), sostiene que se trata de “un aporte de la flora mexicana hacia el mundo”, sustentado en la labor de las personas que la cultivan, quienes la han mejorado genéticamente para embellecer sus características ornamentales.

“Su valor radica, básicamente, en las características de sus flores, que son para muchas personas muy bellas”, además de que suele resistir las bajas temperaturas de diciembre.

En su nombre científico se resalta esta belleza: Euphorbia pulcherrima. “Para los biólogos botánicos o el mundo científico, es el nombre que se le da impulso y rima, porque significa, en latín: la más bella”.

La variedad más común es la roja, también hay hojas modificadas con colores como rosa, amarillas, blanca, marmoleadas y con puntos.

Existen hasta 100 variedades de esta especie y se cultiva entre los 1000 y 1900 m de altitud.Sus hojas pueden alcanzar los 16.

Los mexicas extraían los pigmentos rojos de las brácteas para teñir textiles y el látex se utilizaba como medicina para curar fiebres.

Es una planta que se caracteriza por exudar un látex cuando se cortan los tallos. Los estudios científicos arrojan que no representa un riesgo para tenerlas en casa.

Morelos, Ciudad de México, Puebla, Jalisco, Estado de México, Michoacán y Oaxaca son los principales productores a nivel nacional.

Para que luzca su belleza, debe estar en condiciones templadas, sin superar los 22° C, tener periodos muy extensos de oscuridad, con una iluminación adecuada.

De forma silvestre, es un arbusto alto o un árbol pequeño, alcanzando los cuatro o cinco metros de altura; su distribución en este estado, es en el sur de México y Centroamérica.

La mayoría de las flores que se comercializan son producidas en viveros.

Es una planta muy sensible a temperaturas altas.

La flor de Nochebuena posee varios nombres a lo largo del mundo: Flor de Pascua, Estrella de Navidad, Santa Catalina o Flor de Fuego.

Cuando se acaba la floración queda “la varita”, la cual se puede sembrar en suelo para que florezca el próximo año.

Su tiempo de vida es de hasta tres años si se planta en suelo con los cuidados de riego y luz necesarios, sin embargo, en maceta, caducan en menos de un año.

Su valor es ornamental, sin embargo, hay relatos en los Códices Florentinos que desde tiempos prehispánicos se utilizaban las hojas para incrementar la lactancia en las mujeres.

La nochebuena se usó por primera vez en las fiestas navideñas del siglo XVII, en Taxco, Guerrero. monjes franciscanos recolectó estas flores en los campos cercanos, donde crecían de forma silvestre.

Fuente: cuartopoder.mx