El dispositivo de fusión autosostenida del MIT se construirá desde 2021

Un proyecto de reactor de fusión de nueva generación que logre crear y confinar un plasma que produzca energía neta de fusión sigue adelante, y el inicio de su construcción se fija para junio de 2021.

SPARC consiste en un tokamak –una cámara toroidal con bobinas magnéticas– de combustión compacto y de alto campo, que actualmente está siendo diseñado por un equipo del Instituto de Tecnología de Massachusetts y Commonwealth Fusion Systems.

Siete artículos de investigación escritos por 47 investigadores de 12 instituciones han sido publicados ahora en un número especial del Journal of Plasma Physics. Juntos, los artículos describen la base física teórica y empírica del nuevo sistema de fusión, que el consorcio espera comenzar a construir el próximo año.

En general, “seguimos apuntando a que la construcción comience aproximadamente en junio del 21”, dice en un comunicado Martin Greenwald Martin Greenwald, subdirector del Centro de Fusión y Ciencia del Plasma del MIT y uno de los científicos principales del proyecto

El trabajo avanza sin problemas y por buen camino. Esta serie de artículos proporciona un alto nivel de confianza en la física del plasma y las predicciones de rendimiento para SPARC, dice. No se han presentado impedimentos ni sorpresas inesperados, y los desafíos restantes parecen ser manejables. Esto sienta una base sólida para el funcionamiento del dispositivo una vez construido, según Greenwald.

Se planea que SPARC sea el primer dispositivo experimental en lograr un “plasma ardiente”, es decir, una reacción de fusión autosostenida en la que diferentes isótopos del elemento hidrógeno se fusionan para formar helio, sin la necesidad de ningún aporte adicional de energía.

Estudiar el comportamiento de este plasma en llamas, algo nunca antes visto en la Tierra de manera controlada, se considera información crucial para desarrollar el siguiente paso, un prototipo funcional de una planta de energía práctica y generadora de energía.

Tales plantas de energía de fusión podrían reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero del sector de generación de energía, una de las principales fuentes de estas emisiones a nivel mundial.

Fuente: europapress.es