El ave silvestre más vieja del mundo ha puesto un huevo a los 68 años

Una albatros hembra llamada Wisdom, la ave silvestre más antigua del mundo conocida por el hombre, regresó a su lugar de anidación en las islas de Hawái y puso un huevo. Vale recalcar que Wisdom tiene al menos 68 años, según el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EEUU, en su blog en Tumblr.

Wisdom pertenece a la especie de albatros Phoebastria immutabilis. Estos animales viven en la parte norte del océano Pacífico y se reproducen en enormes colonias de más de un millón de aves en el atolón de Midway, en el noroeste de las islas hawaianas. En 1956, el biólogo estadounidense Chandler Robbins le puso un anillo a Wisdom, que en ese momento tenía al menos seis años. 46 años después, en 2002, Robbins la reconoció cuando visitaba la colonia y pudo leer el número en el anillo, que le había puesto décadas atrás. El científico murió en 2017.

Wisdom y su pareja masculina, Akeakamai (a quien “conoció” en 2006, cuando tenía al menos 56 años de edad) pusieron un huevo el año pasado y criaron un polluelo. Ahora los científicos informan que el ave regresó al sitio de anidación el 29 de noviembre y ha logrado poner un nuevo huevo. Cada temporada, los albatros de espalda oscura ponen uno.

La bióloga Kelly Goodale dice que en 2017, a un metro del nido de Wisdom, los científicos notaron a su cría de 2001 ya adulta. Esta es la primera vez que pudieron observar el regreso de la descendencia de Wisdom. “Cuando Wisdom regresa a casa está rodeada por sus polluelos, esta es una reunión familiar”, dijo Goodale.

Wisdom tiene su propio álbum de fotos en Flickr. Y los albatros de espaldas oscuras son conocidos por las complejas danzas de apareamiento:

Recientemente, una curruca inusual, recién descubierta en Pensilvania, Estados Unidos, alberga un sorprendente secreto genético: se trata de un híbrido de no dos, sino de tres especies diferentes de aves. Su madre era un híbrido de dos currucas distiintas, y su padre un tercer género completamente diferente. Se trata de un evento fascinante para la biología, pero también revela algo alarmante sobre la disminución numérica de esta ave.

Fuente: nmas1.org