Volcán bajo la Antártida que se cree inactivo provocó 85,000 sismos en 6 meses

La mayor agitación telúrica registrada en la historia solo puede corresponder a un evento único que pasa en millones de años, señalan los científicos

En 2020, el monte Orca, un volcán submarino ubicado en lo profundo de la Antártida provocó la mayor agitación telúrica registrada en la historia: 85.000 sismos en un intervalo de 6 meses. Esto ocurrió desde agosto hasta febrero del año siguiente.

Los dos movimientos sísmicos de mayor magnitud en la escala de Richter fueron de 5,9 y 6,0, ocurridos en octubre y noviembre respectivamente. A partir del último de ellos, la actividad sísmica disminuyó de manera significativa, según el artículo publicado en Communications Earth and Environment, donde se detalla el insólito suceso.

La cadena de temblores causados por el volcán Orca intriga a los científicos por diversos motivos. Por un lado, resulta extremadamente raro la sostenida frecuencia en la que ocurrió, ya que su ritmo siempre había sido moderado.

“Ha habido intrusiones similares en otros lugares de la Tierra, pero esta es la primera vez que lo observamos allí”, detalla Simone Cesca, coautora del estudio y sismóloga del Centro Alemán de Investigación de Geociencias (GFZ) de Postdam.

Por otro lado, para Cesca, un gran número de sismos en tan poco tiempo solo significa que se trata de un proceso que “ocurre en escalas de tiempo geológico”, y no en tiempos menores. En ese sentido, se trata de un evento fortuito de presenciar para los humanos.

Como los terremotos en enjambre ocurren principalmente en regiones volcánicas activas, los expertos sospechan que el origen puede ser el movimiento de magma del manto hacia la corteza terrestre.

Dicho desplazamiento de material puede haber ocurrido porque Orca yace sobre una zona de fallas geológicas, donde la placa tectónica de Phoenix se sumerge debajo de la placa antártica continental y genera grietas en la corteza de la Tierra.

Orca es un volcán presuntamente inactivo con una altura de 900 metros, unos 11 kilómetros de diámetro y una caldera próxima de 4 kilómetros. La gigante estructura se encuentra en el Estrecho de Bransfield, un canal ubicado entre la Antártida y el extremo sur de Argentina.

Cesca y su equipo de expertos están reconstruyendo la historia de Orca para descifrar si se encuentra realmente en actividad o no. Los investigadores señalan que si hubo una erupción submarina probablemente ocurrió durante esta serie de sismos; sin embargo, no cuentan con datos que puedan respaldar dicha teoría.

Fuente: larepublica.pe