Se extingue el glaciar Ayoloco del volcán Iztaccíhuatl, alerta Geofísica de la UNAM

Investigadores de la UNAM escalaron el coloso para instalar a cuatro mil 626 metros sobre el nivel del mar una placa firmada por la institución

Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el equipo de montañismo subirán al volcán Iztaccíhuatl para colocar una placa que declara extinto al glaciar Ayoloco, ubicado en el centro de la montaña, en la parte conocida como “la panza” de la mujer dormida.

La información se dio a conocer en la Gaceta de la máxima casa de estudios del país, donde se advierte que cuando un glaciar muere “la cadena que sostiene la vida humana se debilita de manera irremediable”.

Ritualizar la muerte del Ayoloco es una invitación que un equipo de la UNAM hace para informar, sensibilizar y concientizar sobre la importancia de estas maravillosas masas de hielo que dan vida a los pueblos de la región, por el escurrimiento del agua que captan sus mantos acuíferos.

Es precisamente en esta región donde comunidades del municipio de Juan C Bonilla mantienen un plantón indefinido en contra de la embotelladora de agua Bonafont, que pertenece al Grupo Danone, por extraer el recurso hídrico de los veneros del Iztaccíhuatl.

El investigador del Instituto de Geofísica, Hugo Delgado Granados, informó que el Ayoloco era uno de los pocos glaciares permanentes en México, aunado al que había en el Popocatépetl, así como el Citlaltépetl, o Pico de Orizaba, y que tuvo un decrecimiento acelerado en los últimos años debido al fenómeno de calentamiento global.

Para Delgado Granados, la desaparición de los glaciares impacta directo en el ambiente, desde cambios en el clima local dado que, al quedar la roca desnuda, en lugar de reflejar el sol, absorberá el calor.

Lo anterior, comentó, podría resultar en un aumento de temperatura y un cambio del clima en las cumbres de la región del Izta-Popo.

“Esta situación es irreversible y afecta de manera directa a los humanos”, señaló el investigador, luego de destacar que debemos cuidar el ambiente, pues éste es el que puede hacer que las condiciones sean inhabitables para el género humano, lo que podría llevar a la extinción de la especie.

“El mundo seguirá existiendo, pero nosotros ya no tendremos condiciones para habitarlo, y por lo tanto hay que procurar conservar el ambiente para las generaciones que nos preceden”, recomendó.

A la memoria de la masa de hielo, informó que el equipo no solo colocará una placa de acero en el lugar que albergaba al glaciar, sino además se leerán poemas en torno al fenómeno.

La lectura correrá a cargo de la directora de Literatura y Fomento a la Lectura de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, Anel Pérez, quien también forma parte del equipo de montañismo universitario.

En 2001, Hugo Delgado dio la noticia de la extinción del glaciar del volcán Popocatépetl, tras un sistémico proceso de vigilancia y evaluación sobre los glaciares mexicanos.

El origen de tan singular suceso, dijo que se debió a los efectos que tuvo la erupción del volcán sobre los hielos.

“Desde que en 1994 inició la erupción, los materiales calientes, conocidos como proyectiles balísticos, más las cenizas, han caído sobre la superficie de nieve y el hielo glaciar, causando el deshielo”, precisó.

Los beneficios que aportan estas masas de hielo son tan evidentes que a veces pasan inadvertidas, consideró el investigador.

A fin de cuentas, expuso que son cuerpos de agua en forma sólida, pero en época de secas se funden por efecto del clima y aportan agua a las escorrentías sobre cuencas que irrigan.

“De manera que, si desaparecen los glaciares, simple y sencillamente disminuyen los flujos, no hay agua”, alertó.

Al final, dijo que el volcán Iztaccíhuatl, que se ubica a 5 mil 240 metros de altura, contaba con cinco zonas glaciares (una en el pecho, otra en la panza, y tres en el suroriente), comparadas con los 11 que llegó a tener hace tiempo.

“Prácticamente ha desaparecido gran parte de la cantidad de hielo que produce, y está en una situación vulnerable. Está cerca del límite”, concluyó.

Fuente: jornada.com.mx