Meimei y Hehe son dos pandas gemelos hijos de una madre en cautividad y un padre en libertad, lo que los convierte en promesa para la supervivencia de su especie.

Los hermanos, nacidos hace un año en la reserva de Hetaoping, al suroeste de China, son resultado de los esfuerzos de diversificación genética de este animal en peligro.

Este éxito fue oficialmente inscrito esta semana en el Libro de los récords, en una ceremonia llevada a cabo en la reserva de Shenshuping, donde residen ahora los dos pequeños pandas.

El nacimiento de gemelos se produce en un caso de cada dos, pero el de Meimei (“Felicidad” en chino) y Hehe (“Armonía”) “fue particularmente difícil”, afirmó Liu Xiaoqiang, uno de los responsables de la reserva de Hetaoping.

Hubo que reintroducir temporalmente a su madre, criada en cautiverio, en la naturaleza. Tardó un mes antes de aparearse con un macho, lo que se produjo al margen de cualquier intervención humana.

“La diversidad genética de los pandas en cautividad es bastante limitada, por eso tuvimos que introducir sangre nueva procedente de la naturaleza”, explicó Liu.

El nacimiento de gemelos constituye “un gran paso” para el enriquecimiento genético de los pandas en cautiverio y alienta a los investigadores a repetir la experiencia en el futuro, agregó.

La reproducción de los pandas es notoriamente difícil: la hembra es fértil solamente unos días por año y el macho no suele demostrar demasiado interés por aparearse.

Fuente: tecreview.tec.mx