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Mamíferos sucedieron a los dinosaurios con pies robustos

La evolución de los huesos del tobillo y del pie en diferentes formas y tamaños ayudó a los mamíferos a adaptarse y prosperar después de la extinción de los dinosaurios, sugiere un nuevo estudio.

Un aumento de la evolución después de la extinción masiva hace 66 millones de años permitió a los mamíferos diversificarse y prosperar durante un período de gran cambio global, dicen los investigadores.

El análisis de los huesos que forman parte del tobillo y el talón del pie revela que los mamíferos durante esta época, el Paleoceno, eran menos primitivos de lo que se pensaba.

Los paleontólogos de la Universidad de Edimburgo hicieron el descubrimiento comparando la anatomía de los mamíferos del Paleoceno con especies del Período Cretácico anterior y las que existen en la actualidad, informa la universidad en un comunicado.

Analizaron las medidas de los huesos del pie y el tobillo, que brindan información sobre el estilo de vida y el tamaño corporal de los animales, de 40 especies del Paleoceno. El equipo contrastó los resultados con datos de especies de mamíferos vivos y mamíferos que existieron durante el Período Cretácico.

Sus hallazgos muestran que los mamíferos del Paleoceno tenían constituciones más robustas y musculosas que los del Cretácico o de la actualidad.

Las articulaciones de los animales también eran muy móviles, sostenidas por ligamentos y tendones, en lugar de características óseas como en algunos mamíferos vivos, que el equipo hipotetiza les permitió adaptarse y evolucionar más rápidamente después de la extinción.

Los tobillos y pies de muchas especies se parecían mucho a los de los mamíferos terrestres y excavadores que existen en la actualidad, lo que indica que estos estilos de vida fueron clave para sobrevivir y prosperar después de la extinción masiva, que fue causada por el impacto de un asteroide.

La capacidad de excavar bajo tierra, por ejemplo, probablemente haya ayudado a los mamíferos a sobrevivir a la devastación inicial, mientras que la pérdida de hábitats de árboles después del período de extinción puede haber favorecido a las especies que habitan en el suelo, dice el equipo.

El estudio se publica en la revista Proceedings of the Royal Society B.

Fuente: europapress.es