Hallan una especie de alga carnívora que devasta animales, plantas y producción acuícola de salmón
Una especie microbios eucariotas, los oomycetes, parecidos a hongos patógenos están causando un gran impacto en ecosistemas naturales y cultivados y está dañando las producciones acuícolas, según un estudio internacional en el que participa el Real Jardín Botánico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
Los oomycetes se encuentran entre los patógenos más devastadores de animales y plantas del medio ambiente, causando un gran impacto en ecosistemas naturales y cultivados y con ello un notable perjuicio a la economía del sector. Similares a los hongos patógenos, introducen sus proteínas en el huésped provocando su infección y propagación.
En un artículo publicado en la revista Nature Communications, se describe el mecanismo molecular que devasta animales y plantas en el medio natural. El estudio se enmarca dentro del proyecto europeo SAPRO Marie Curie y en este participa el investigador del CSIC en el Real Jardín Botánico Javier Diéguez-Uribeondo.
La saprolegniosis es una enfermedad de peces altamente destructiva causada principalmente por Saprolegnia parasitica, que infecta a peces adultos, y S. diclina, que infecta los huevos. Las especies de Saprolegnia son endémicas de todos los hábitats de agua dulce de todo el mundo y representan un problema grave para la industria de la acuicultura.
En cambio, poco se sabe sobre los efectos de las proteínas de Saprolegnia parasítica y cómo se manifiesta en las células de un cuerpo que invade en las primeras etapas de la infección. De ahí que una investigación internacional, haya estudiado el proceso que sigue este oomycete en peces, con un resultado parecido al que realizan en plantas y otros animales.
El investigador explica que el Saprolegnia parasítica es un patógeno que se puede denominar ‘alga carnívora’ aunque su genética es mejor que la de las algas feofíceas y diatomeas, que coloniza a los salmónidos, provocando en este caso pérdidas millonarias en la acuicultura mundial al matar de una manera sistemática a miles de peces de agua dulce.
Además, añade que en el estudio, coordinado por el profesor de la Universidad de Aberdeen Pieter van West, su grupo colaboró en el conocimiento de la biodiversidad de este patógeno, seleccionando cepas para el estudio y describiendo las propiedades fisiológicas que influyen en la infección.
Para ello ha utilizado una gama de técnicas bioinformáticas, moleculares y bioquímicas que han permitido identificar los efectos potenciales del patógeno dentro de los peces.
El trabajo describe las estructuras de infección que realiza el patógeno en los peces, muy similar a la infección que efectúa en las plantas, el desplazamiento de las células, la liberación de proteínas mostrando la que entra en las células de los peces de manera independiente al patógeno y otros procesos y mecanismos de infección.
En el estudio ha trabajado un equipo formado por dieciséis investigadores de centros como la Universidad de Colonia y Duisburg-Essen, en Alemania; la Universidad de Malasia; el Instituto de Ecología de Holanda; y los ya citados, Universidad de Aberdeen, en Escocia, y el Real Jardín Botánico (RJB-CSIC) de España.
Fuente: europapress.es