Traustoquítridos: microbios marinos que podrían abastecer al mundo de omega-3
María Concepción Lora Vilchis y Nayelly Avilés Aguilar
La Dra. María Concepción Lora Vilchis y la Ing. Pesq. Nayelly Avilés Aguilar son investigadora y estudiante del Programa de Acuicultura del CIBNOR. Contacto: cony04@cibnor.mx.
¿Sabías que los ácidos grasos omega-3 que se venden para proteger tu corazón casi siempre vienen de peces capturados en alta mar? Detrás de las cápsulas de aceite de pescado hay toneladas de sardina y anchoveta que, además de ser alimento básico en la cadena trófica, ya están sobre-explotadas .Una buena noticia es que esos mismos nutrimentos pueden ser producidos de forma sostenible por unos diminutos habitantes del manglar: los traustoquítridos.
¿Quiénes son estos protagonistas microscópicos?
Los traustoquítridos (del latín Thraustochytrida) forman un grupo de protistas unicelulares —no son bacterias ni «microalgas»— que viven en sedimentos, hojas caídas, macroalgas, raíces de los manglares. A simple vista son invisibles, pero bajo el microscopio lucen como bolitas doradas cuyas esporas se mueven mediante dos flagelos.
Son especialistas en descomponer la materia orgánica, liberando nutrientes que alimentan a otros habitantes del manglar como larvas y juveniles de cangrejos, camarones y peces.
A diferencia de las algas fotosintéticas, estos organismos no usan la luz: comen el carbono orgánico disponible. Además, tienen el potencial de transformar una buena parte de este alimento en grasa, entre ellas los preciados DHA y EPA —los mismos ácidos grasos que hoy se obtienen del pescado— algunas también pueden producir pigmentos antioxidantes como astaxantina y β-caroteno.
El proyecto: buscar estos productores de DHA en los manglares sudcalifornianos
En el Laboratorio de Alimento Vivo del CIBNOR (La Paz, BCS) hemos explorado los manglares locales y aislado 18 cepas puras de traustoquítridos. Algunas destacan por producir hasta 30 % de su peso seco en aceite rico en DHA, mientras que otras además sintetizan pigmentos carotenoides, moléculas de alto valor comercial muy importantes para la industria acuícola de camarones y salmones ya que se incluyen en los alimentos para darles la coloración típica.
¿Por qué son tan importantes los omega-3?
El DHA es clave en el desarrollo del cerebro y la visión durante el embarazo y la primera infancia. En adultos se asocia con menor riesgo de enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas, incluyendo algunos tipos de cáncer. Los animales No lo fabricamos: tenemos que ingerirlo.
Actualmente, más del 90 % del DHA comercial proviene de peces capturados. Producirlo directamente de traustoquítridos resolvería tres problemas a la vez:
Sostenibilidad: no sería necesario capturar más peces marinos.
Calidad: aceites más puros, libres de metales pesados.
Economía local: oportunidad para comunidades ribereñas y para la industria biotecnológica mexicana.
De los manglares al mercado
Pocas empresas en Estados Unidos y Asia ya producen aceite de traustoquítridos a escala industrial, pero muchas dependen de cepas importadas y patentes extranjeras. Nuestro estudio posibilita el desarrollo de una cadena de valor 100 % nacional, desde la investigación hasta el encapsulado final.
Además, los pigmentos que producen —astaxantina, licopeno, cantaxantina— son tan valiosos como el propio aceite. Podríamos imaginar una biorrefinería costera que obtenga, del mismo cultivo, suplementos nutracéuticos y colorantes naturales.
Un recurso marino que también cuida el manglar
Los manglares son los riñones de la costa: fijan CO₂, frenan huracanes y sirven de guardería a cientos de especies. Al estudiar sus microbios y darles un uso responsable, se podrían generar incentivos para conservarlos.
¿Qué sigue?
Nuestro siguiente paso es optimizar su cultivo: ajustar el balance Carbono/Nitrógeno, salinidad y temperatura y determinar la fase de crecimiento de mayor acumulación de lípidos.
- Evaluar subproductos agroindustriales locales como sustrato.
- Realizar pruebas de seguridad y biodisponibilidad de los aceites.
- Diseñar biorreactores piloto (100-1000 L).
En resumen: los traustoquítridos son células microscópicas, pero su potencial es enorme.
¡El futuro del aceite de pescado podría no venir de los peces, sino de estos minúsculos aliados del manglar!
Fuente: oem.com.mx