Desarrollo y uso de pesticidas botánicos orgánicos: en busca del control de plagas agrícolas

Dr. Odón Vite Vallejo

odon.vite@ultraquimia.com

Odón Vite realizó el doctorado en el CEIBUAEM bajo la tutoría del Dr. Jorge Luis Folch y la Dra. Laura Palomares fue su cotutora (20052009). Posteriormente realizó una estancia posdoctoral en el laboratorio de la Dra. Brenda Valderrama en el IBt (20092010).

Al iniciar por el camino de la investigación en el IBt, desde que fui estudiante de licenciatura, sabía que la carrera de investigador sería mi aspiración. Recuerdo el día a día en cada uno de los laboratorios donde estuve trabajando en diversos proyectos, desde el laboratorio de la Dra. Guadalupe Espín, los Dres. Tonatiuh Ramírez y Laura Palomares, hasta el laboratorio de la Dra. Brenda Valderrama. En cada uno de ellos adquirí conocimientos y herramientas de trabajo necesarias para mi formación como investigador. Recuerdo las pláticas con la Dra. Palomares, sobre la importancia de entender a fondo tanto el proyecto de investigación que en su momento estaba realizado, como la finalidad de su estudio. Palabras que, al concluir mi proyecto y estancia en su laboratorio, y hasta la fecha, me motivan para aplicar el concepto de esas palabras en cada uno de los proyectos de investigación que he desarrollado.

Actualmente laboro en la industria privada, donde uno de los principales retos es aplicar los conocimientos que adquirí durante mi formación, con el objetivo de contribuir con la empresa en la adquisición de información biotecnológica, necesaria para el desarrollo de productos innovadores.

En la empresa Promotora Técnica Industrial (PTI, perteneciente al grupo Ultraquimia), específicamente en el área de investigación y desarrollo (I&D), participo en la búsqueda de nuevas propuestas de productos, así como en la mejora de los productos con los que ya cuenta la empresa para el control de plagas de cultivos agrícolas. Dentro de los principales productos que se desarrollan en la empresa, están los relacionados con plaguicidas orgánicos a base de extractos de plantas. Con este tipo de productos se busca un control de plagas que sea amigable tanto con el cultivo, como con el ambiente en el que los cultivos se desarrollan. Actualmente la gran mayoría de los productos orgánicos de la empresa han sido certificados como productos que pueden ser utilizado en el control de plagas en cultivos orgánicos. Los productos de la empresa actualmente en el mercado, cuentan con registros de la COFEPRIS y algunos con registro OMRI.

Ya existen en el mercado un buen número de marcas que ofrecen productos para el control de las plagas y/o las enfermedades que afectan a los cultivos agrícolas; sin embargo, la mayoría de estos productos son de síntesis química. Una desventaja del uso de estos pesticidas es que no solamente matan a la plaga en cuestión, sino también a la comunidad biológica natural presente en los cultivos. Los productos sintéticos, dañan tanto a los ecosistemas como a la salud humana.

Debido a los problemas causados por los productos de síntesis química para el control de plagas, en la actualidad se busca el uso de compuestos orgánicos. Entre los productos orgánicos más sobresalientes, se encuentran los obtenidos de diferentes plantas. Algunos ejemplos son los siguientes: la infusión de epazote, que presenta actividad insecticida, nematicida y fungicida entre otras; extractos de aceite de orégano, con actividad fungicida, bactericida e insecticida; extractos de tomillo que poseen actividad fungicida e insecticida.

La empresa PTI actualmente ya cuenta con diversos productos en el mercado de origen botánicoorgánico fabricados a nivel industrial que tienen resultados favorables en el control de las plagas. Entre los productos que se encuentran disponibles hay un formulado a base de la mezcla de diferentes extractos de plantas, como la mezcla de argemonina, berberina y ricinina que se utiliza como acaricida e insecticida; un extracto de “gobernadora” o Larrea tridentata con efecto bactericida y fungicida; un formulado con actividad insecticida a base de extracto de ajo (Allium sativum), chile picante (Capsicum frutescens) y canela (Cinnamomum zeylanicum).

Es posible obtener varias mezclas de extractos de plantas o de compuestos aislados de las mismas, que pueden ser utilizados como controladores de plagas que eviten el uso de insecticidas de síntesis química.

En I&D dentro de la empresa PTI, trabajamos en el desarrollo del control de una plaga de amplio interés debido a su impacto en la agricultura: la mosca blanca (Bemisia tabaci) [figura1]. Esta mosca, ataca a más de 500 especies de plantas, entre ellas Phaseolus vulgaris (frijol), Capsicum annuum (chile), Cucurbita máxima (calabaza) y Solanum lycopersicum (tomate). Las ninfas (larvas que deben pasar 4 etapas antes de madurar) y los adultos causan daño directo por la succión de la savia, lo que ocasiona el amarillamiento de las hojas de la planta, la que, al detener su crecimiento, puede llegar a morir.

El daño más importante que provocan las moscas es cuando actúan como vectores de virus, de éstos, el más conocido en México es el virus del “chino del tomate” (TLCV) asociado a altas poblaciones de B. tabaci. Los estudios preliminares para su control realizados en el laboratorio de la empresa, mostraron que extractos etanólicos de diferentes plantas, entre ellas de epazote, orégano, pimienta y tomillo, aplicadas a diferentes concentraciones, alcanzaron el 100% de la mortalidad de la población de mosca blanca. Esperamos que al hacer la evaluación en campo, la mortalidad de las moscas sea similar a la obtenida en el laboratorio, tomando en cuenta que las condiciones en cada entorno son distintas y en general menos controladas en campo que en el laboratorio. El objetivo es formular un nuevo producto orgánico para el control de la mosca blanca.

Otra plaga difícil de erradicar de los cultivos es Scyphophorus acupunctatus o picudo del nardo o el maguey (figura 2). En el estado de Morelos, este coleóptero (insectos también conocidos como escarabajos) es la principal plaga del nardo, mientras que en Tamaulipas es la principal plaga de cultivos de agave. Para el caso del nardo (Polianthes tuberosa), el picudo se alimenta de los bulbos de la planta y dentro de ellos completa sus estadíos de crecimiento (hasta llegar a adulto), de donde emerge para repetir su ciclo de vida. Los daños causados por las larvas y algunos microorganismos, que han sido asociados con el picudo, pueden causar marchitamiento y la muerte posterior de la planta. En el caso del agave, se encontró a este insecto atacando la piña y el cogollo de la planta y se localizó en la mayoría de las plantaciones de agave mayores de cuatro años de edad, generalmente en altas poblaciones. Para este proyecto, evaluamos extractos etanólicos obtenidos de semilla de pimienta y de la planta de epazote contra larvas del picudo del nardo y evaluamos su efecto sobre la mortalidad de las mismas. Con el extracto de semilla de pimenta se alcanzó el 70% de mortalidad de las larvas evaluadas a una concentración de 0.3%. Con el extracto de la planta de epazote, la mortalidad de las larvas evaluadas fue del 50% a una concentración de 0.3%. A pesar de que los resultados de mortalidad se obtuvieron con altas concentraciones de los extractos y que la mortalidad no fue del 100%, nos da referencia sobre cuál extracto es el mejor y nos planteamos, a mediano plazo, llegar a identificar y purificar los compuestos que la planta produce y que son los responsables del efecto nocivo para las plagas. En este caso, deseamos formular un producto orgánico que mate al picudo utilizando los compuestos aislados o bien una mezcla de ellos.

A pesar de que se pudiera pensar que los temas relacionados con el control de plagas en cultivos agrícolas ya han sido ampliamente estudiados y manejados con el uso de extractos botánicos, todavía falta mucho camino para dominar el tema. Para llegar a un producto orgánico a nivel industrial, es necesario resolver diferentes aspectos. La disponibilidad de las materias primas, la potencia de los extractos, la evaluación en las distintas plagas, el costo económico, así como la aplicación de los mismos en el campo (debido a la costumbre de utilizar métodos de control que implican sustancias de síntesis química), son las principales barreras que hay que superar para que un producto sea aceptado en el mercado.

Por estas razones, en la empresa PTI no solamente formulamos un producto, además, difundimos la información entre los agricultores y los involucrados en la cadena de producción y comercialización para así generar conciencia entre todos los actores relacionados con el tema del control de plagas en campo. Con estas acciones, la empresa desea generar confianza en el uso de sus productos que al mismo tiempo favorezca el cambio hacia el control de plagas en condiciones amigables para el nicho ecológico donde estas plantas son cultivadas.

Fuente: Revista Biotecnología en Movimiento