La doctora en geografía, Irasema Alcántara Ayala, recibió la medalla Sergey Soloviev 2016, que otorga la Unión Europea de Geociencias, por sus estudios analíticos acerca de las comunidades expuestas al riesgo de desastres y el impulso a métodos de investigación para reducir dichos riesgos.

Gracias a su investigación en la que confluyen ciencias sociales y naturales, la doctora Alcántara se convirtió en la primera mujer y la primera latinoamericana en recibir el reconocimiento del organismo científico.

La presea es entregada a quienes, con sus aportaciones sobresalientes en investigación básica, contribuyan sustancialmente al conocimiento de la dinámica de las amenazas naturales, su evaluación y mitigación, así como en prevención de desastres, como fue el caso de la científica mexicana.

La investigadora del Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mencionó, en entrevista para a la Agencia Informativa Conacyt, que esta medalla significa un mayor compromiso con su trabajo, en “la necesidad de influenciar y trascender a la práctica y toma de decisiones en materia de reducción y riesgo de desastres”, así como con la formación de nuevas generaciones de investigadores.

Para la doctora Alcántara Ayala, el quehacer del geógrafo es fundamental en la prevención de desastres naturales: “nuestro anhelo y trabajo gira en torno a la visión y el compromiso de que hoy no sea demasiado tarde”, y que es el manejo adecuado del entorno.

Actualmente desarrolla el proyecto de investigación MISTLI, que significa “puma” en náhuatl, y es el acrónimo de Monitoreo, Instrumentación y Sistematización Temprana de Laderas Inestables.

La galardonada explicó a Conacyt que MESTLI es un proyecto multidisciplinario que se desarrolla para el municipio de Teziutlán, Puebla, en el que se busca contribuir a la gestión integral de riesgo de desastres en colaboración con la comunidad y las autoridades locales.

La investigadora planea continuar trabajando la reducción de riesgo de desastres por inestabilidad de laderas, así como en la evaluación de los obstáculos técnicos, operacionales e institucionales que impiden el desarrollo de estrategias de gestión integral de desastres en el país.

Fuente: Sin Embargo