Descubren un compuesto de metal orgánico que podría revolucionar el almacenamiento de datos
Científicos de diferentes instituciones de Irlanda, Estados Unidos, Singapur e India han colaborado en el descubrimiento de una nueva molécula que, según afirman, podría tener un gran impacto en las tecnologías de almacenamiento de datos. Este compuesto de metal orgánico permitiría trascender los límites de la lógica binaria, pudiendo alternar entre tres estados diferentes por tiempo prolongado.
Las tecnologías de almacenamiento de datos actuales se basan en el magnetismo y en la electricidad, lo que ha dado lugar a los soportes HDD y SSD que se utilizan en todos los ordenadores y plataformas de almacenamiento, ya sean de consumo o de categoría empresarial. Estos sistemas siguen la misma lógica binaria de la informática tradicional, con unidades fundamentales de información que pueden tener solo dos valores: 1 o 0.
Pero la computación está evolucionando y actualmente la mayoría de científicos e ingenieros vinculados a la industria están buscando soportes basados en nuevos materiales, con el fin de aumentar la capacidad disponible y el rendimiento. Pero este no es el único campo de investigación, ya que varias tecnologías que se están desarrollando ahora mismo prometen proporcionar más estados posibles para las unidades básicas de información, trascendiendo los límites de lo binario para añadir más posibilidades.
Uno de los proyectos de investigación que va en esta dirección es el que están desarrollando conjuntamente desde el Instituto Bernal de la Universidad de Limerick (Irlanda), la Universidad Nacional de Singapur, la Asociación India para el Cultivo de la Ciencia y la Universidad de Texas A&M. Estos científicos acaban de publicar un artículo en la revista Nature Nanotechnology, en el que revelan el descubrimiento de una nueva molécula de metal orgánico, capaz de cambiar entre tres estados diferentes, proporcionando una posibilidad adicional a los tradicionales 1 y 0.
Este enfoque no tiene nada que ver con otras tecnologías de almacenamiento molecular que se están investigando en diferentes universidades y empresas de todo el mundo. Su idea es cambiar de un almacenamiento binario a uno basado en memristores ternarios. Esto podría tener un impacto importante en el uso de aplicaciones que consumen grandes cantidades de información, por ejemplo, la inteligencia artificial, el Big Data o Internet of Things. Según sus creadores, esta molécula permitiría contar con un soporte de datos de baja energía y alta capacidad.
Según comentó en su artículo Damien Thompson, profesor asociado de física de la Universidad de Limerick, quien lidera un equipo de desarrollo de materiales en la Instituto Bernal, su investigación demostró la existencia de este tercer estado en simulaciones realizadas en un importante centro de supercomputación irlandés. Explicó que este tercer estado es posible gracias a un reparto desigual de los electrones entre los diferentes lados de la molécula.
En opinión de Thompson, los desafíos del Big Data apenas acaban de mostrar su verdadero alcance, y ya están suponiendo un quebradero de cabeza para las organizaciones que quieren usar esta tecnología para extraer valor e información de los datos en bruto que se generan masivamente. Ante esto es necesario contar con tecnologías que sean más eficientes y sostenibles, y aquí es donde tiene cabida su descubrimiento. En sus palabras, su equipo logró “avanzar mucho más allá de las hojas de ruta de la industria al encontrar un dispositivo de memoria resistivo ternario, con tres estados que están bien separados entre sí en términos de conductancia y, lo que es igual de importante, se mantienen trabajando perfectamente durante semanas”.
Añadió que. “el truco de este primer dispositivo informático de varios niveles, comercialmente viable, es un fenómeno físico ligeramente arcano llamado desproporción de carga o ruptura de simetría, que probamos utilizando simulaciones por computadora”. Ahora esperan pasar a la siguiente fase de desarrollo, construyendo un dispositivo físico que pueda ser utilizado en entornos reales, que se convertiría en el primer sistema de almacenamiento basado en la explotación de materiales orgánicos para aplicaciones eléctricas, algo de gran trascendencia.
Fuente: almacenamientoit.tuser.es